La investigadora española Jara Valtueña, de la Universidad Politécnica de Madrid, presentó en un congreso sobre nutrición en Sao Paulo una pirámide al modo de la tradicional pirámide alimenticia que incluye además factores de estilo de vida saludable.
La pirámide fue creada por el grupo ImFINE con enfoque en niños y adolescentes, basado en los estudios Helena y Avena, realizados con niños y adolescentes europeos.
Valtueña manifestó que la adolescencia "es el período más crítico", puesto que los jóvenes "ya adquieren cierta independencia y aunque saben distinguir lo que es bueno o malo para la salud, comen lo que les gusta".
Los estudios descubrieron que los factores de riesgo relacionados con hábitos alimentares se establecen durante ese rango de edad. Sin embargo, la dietista apunta que las pirámides alimentarias previamente existentes no eran adaptadas a ese público.
"Es difícil para un niño saber cuánto hay que comer. Además, conceptos de actividad física, hidratación y estilo de vida casi nunca son contemplados", declaró Valtueño.
La nueva pirámide, que además de aspectos nutricionales incluye factores de estilo de vida saludable, fue inspirada en la pirámide maya, con cuatro caras, cada una con cuatro escalones, y sin pico.
"Lo hicimos sin pico porque queríamos dar la idea de que no hay un objetivo específico, cada escalón es importante aunque en cantidad y calidad distintas", explicó.
Las cuatro caras se dividen en alimentación diaria y actividades diarias.
"La base representa el continuo aprendizaje, dividido por edades de 6 a 9 años, de 10 a 13 y de 14 a 18 años", explicó Valtueña. Según ella, las tres fases tienen como objetivo crear hábitos saludables, consolidarlos y no perderlos.
Valtueña también destacó la importancia de la escuela y los padres en la creación y manutención de los hábitos de los niños y adolescentes.
EFE