Luego de pasar 22 meses detenido por tráfico de drogas en Italia, el pesista zuliano Israel Rubio llegó a Maiquetía a las 5:10 p.m de este sábado. Con un bolso de mano color negro y nuevo look, el deportista fue recibido por su esposa Maylín Landaeta.
“Quiero llegar a mi casa, estar tranquilo, compartir con la gente que me está esperando,ver a mis hijos, visitar a mi papá en el cementerio”, expresó a su llegada.
Rubio aprovechó la oportunidad para contar su versión de los hechos ocurridos el pasado mes de enero de 2012. “Me vine a entrenar (a Caracas) y decidí ir a Barcelona a entrenarme allá para los Juegos Olímpicos, tenía un amigo que me estaba esperando, es venezolano y trabaja allá de entrenador, me iba a conseguir hotel y comida que me costara menos”. No pudo llegar a su destino porque el vuelo Caracas-Roma se retrasó y perdió la conexión a Barcelona.
“El otro amigo mío que tú sabes quién es (Leonel Albarrán) viajó también, él me dijo que necesitaba hacer una cosa en España que se iba conmigo. Cuando llegué en el aeropuerto conseguí solo a Leo aquí, como el otro vuelo nos había dejado él me dijo que diéramos una vuelta, que fuéramos al coliseo, que el cambio del boleto costaba 40 euros, que nos quedáramos unos días, que él tenía unas amigas”, relató
“El día que Leo fue a cambiar los boletos no lo quise acompañar porque Roma quedaba a dos horas, yo no sabía que íbamos tan lejos para que sus amigas, yo me quedé y fue cuando llegó la Policía. Si me hubiese ido con él no me agarran”, agregó.
La policía de Pescara -Italia- decomisó ese día 2 kilos de cocaína, con valor comercial de más de 100 mil euros. Por esta razón, quedaron detenidas 4 personas, entre ellas, el atleta venezolano.
“Yo no entendía nada de lo que decían, empezaron a revisar todo ( en el apartamento) y consiguieron la droga en un armario. Yo no sabía que eso estaba ahí, sino ni siquiera pisaba esa casa. Luego le pregunte a la dueña desde cuando la tenía y me dijo que siempre estuvo ahí, que discutió con su amiga la noche anterior y ella le contó a la Policía”, contó.
Rubio dio pocos detalles del apoyo de autoridades venezolanas. “Dos veces fue la gente de la embajada de Roma, lo que me dieron fue un mono, una chaquetica y unas medias”.
Por último, Israel Rubio manifestó su deseo de seguir practicando pesas. “No me pueden negar que vuelva al deporte, es un derecho y está en la ley, y si tengo mis marcas y estoy en forma no me pueden quitar esa oportunidad”.
Con información de LaVerdad.com
