Un total de 697 personas han muerto en nueve días de combates en Siria entre brigadas rebeldes y el Estado Islámico de Irak y del Levante, vinculado a Al Qaeda, según el recuento de víctimas difundido este domingo por el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Este grupo especificó en un comunicado que los enfrentamientos se registraron en las provincias de Idleb, Alepo y Al Raqa, en el norte del país; en Homs y Hama, en el centro; y en Deir el Zur, en el este.
El desglose de víctimas señala que 351 de los fallecidos son combatientes de las brigadas rebeldes, en su mayoría islamistas, y 246 del Estado Islámico de Irak y del Levante (ISIL en sus siglas en inglés), mientras que 100 son civiles.
Según el Observatorio, los yihadistas ejecutaron a 21 civiles en un hospital de Alepo y a 32 rebeldes en varias provincias, que están incluidos en el recuento final.
Este grupo, con base en Londres y una amplia red de activistas sobre el terreno, informó de que se desconoce el paradero de centenares de combatientes de ambos bandos.
Los enfrentamientos comenzaron el pasado 3 de enero entre una alianza de grupos rebeldes y el ISIL en la mitad norte del país, por lo que los insurgentes consideran las violaciones cometidas por los yihadistas.
El Frente al Nusra, que está también vinculado a Al Qaeda pero mantiene cierta rivalidad con el ISIL, propuso el pasado día 7 un plan para acabar con los enfrentamientos, que incluye un alto el fuego y un intercambio de prisioneros.
En noviembre pasado, el líder de Al Qaeda, Ayman al Zawahiri, insistió en que el Frente al Nusra es la única filial en Siria de su grupo terrorista, y delimitó la actividad del ISIL al territorio iraquí.
EFE