Lo Último

.

.

jueves, 27 de febrero de 2014

Trastornos del sueño se producen por enfermedades mentales o físicas, según expertos

La psiquiatra Aura Carolina Masías, explicó que el trastorno del sueño es cualquier modificación que altere el patrón normal del descansar de una persona que cause consecuencias al día siguiente. 

"Casi siempre refieren al trastorno del sueño como al insomnio, pero la realidad de este aspecto es que se prescriben: el dormir de más, los trastornos respiratorio y la parsimonia", dijo la experta en el programa Soluciones

Por su parte, el neurólogo Claudio Cárdenas indicó que no se considera desorden del sueño aquella persona que no duerma bien y que esté activo al día siguiente ya que presenta "un corto dormir" en su organismo, sino cualquier elemento que afecte su reposo. 

Señaló que este tipo de alteraciones de descanso se producen mayormente por "enfermedades mentales o físicas". 

Tipos de trastornos del sueño en niños 

Según Cárdenas, estudios arrojan que 95% de los trastornos del sueño de los niños se deben por hábitos inadecuados. "En ello se presentan 2 tipos de alteraciones como: insomnio infantil por manejos inadecuados del límite y por inicio del sueño inadecuado", explicó. 

En el caso de los jóvenes, el especialista consideró que el adolescente es principalmente el "gran dormilón" debido a que existen cambios hormonales importantes en su organismo y por esto "necesitan dormir mas". 

Recomendó a los ciudadanos descansar al menos 7 ó 8 horas diarias para así ajustar de manera efectiva sus actividades físicas, y en torno a los niños hay que "hacer sentir al joven que el dormir es algo agradable". 

Estrés y la conciliación del sueño 

De acuerdo con los expertos, el cansancio mental producido por las tensiones nerviosas (estrés), se ha visto reflejado los últimos días en los venezolanos y esto se denominan "insomnio agudo o situacional". 

Masías sostuvo que en este tipo de alteraciones en los individuos pueden presentar síntomas como: ansiedad, preocupación, tristeza, tensión muscular, molestias gastrointestinales (acidez, diarrea), dolores de cabeza, irritabilidad, dificultad para concentrarse, entre otros.