En Mali ayer se abrió un nuevo centro de la Misión de Naciones Unidas para la Respuesta de Emergencia contra el Ébola (UNMEER). A su vez, el Banco Mundial aprobó un proyecto de 70 millones de dólares para Côte d'Ivoire para promover medidas para prevenir la propagación de la enfermedad.
Pero a pesar de los progresos, Naciones Unidas hizo una advertencia contra la complacencia.
En su última actualización, la Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que el número de muertes por el virus mortal del ébola ascendió a 5.689 hasta el 23 de noviembre, si bien la incidencia de casos es estable en Guinea, está declinando en Liberia pero sigue aumentando en Sierra Leona.
Stuart Kefford del Programa de Desarrollo de Naciones Unidas en Liberia dice que ha habido un punto de inflexión en la lucha contra el ébola.
"Antes estábamos siendo cazados. Ahora estamos luchando contra la enfermedad conforme el número de casos se reduce. Pero debemos recordar que solo estamos donde estábamos a principios de agosto. En agosto veíamos esto como un asunto muy serio. No podemos ser complacientes. Seguimos en una situación muy mala", señaló.
Mientras tanto, Naciones Unidas ha dicho que es improbable que alcance su meta de 1 de diciembre para enterrar en condiciones seguras a 70 por ciento de los fallecidos y tratar a 70 por ciento de los enfermos en África Occidental.