Una falla del piloto habría sido la causa de la caída del avión que provocó la muerte, el pasado 13 de agosto, del candidato presidencial brasileño Eduardo Campos y otras seis personas, de acuerdo con las primeras investigaciones de las autoridades, publicó el diario O Estado de Sao Paulo.
Documentos de la investigación adelantados por las Fuerza Aérea Brasileña, a los que tuvo acceso el diario, señalan que la "falta de entrenamiento" para pilotar ese tipo de aviones, un Cessna 560 XL, y una "secuencia de errores" provocaron la caída de la aeronave.
El avión transportaba al exministro y exgobernador del estado nororiental de Pernambuco, a cuatro asesores y a dos tripulantes.
Campos, en la época titular del Partido Socialista Brasileño (PSB), estaba en plena campaña presidencial y murió cuando el avión en el que viajaba de Río de Janeiro a Guarujá, en el Litoral Paulista, tuvo que desviar su destino hacia el vecino puerto de Santos por cuestiones climáticas.
El resultado oficial de las investigaciones comenzará a ser divulgado en febrero.
La investigación, señaló el periódico, indicó que el piloto Marcos Martins fue obligado por la lluvia a abortar el aterrizaje inicial en Guarujá y desviarse hasta la vecina Santos, pero que realizó esa maniobra de forma brusca y sin seguir el procedimiento recomendado por el fabricante.
Esa situación, según las informaciones, causó una "desorientación espacial", que es la pérdida de la referencia entre la aeronave y el suelo y derivó en el impacto contra residencias del barrio Boqueirao, en la ciudad de Santos.
El Centro de Investigación y Prevención de Accidentes Aeronáuticos (Cenipa), adscrito a la Fuerza Aérea, realizó una evaluación psicológica y profesional del piloto y su copiloto y también determinó que la aeronave no presentó fallas técnicas, de acuerdo con O Estado.
El informe apuntó también que Martins nunca pasó por el simulador de vuelo para ese tipo de aviones y en su perfil de las redes sociales, días antes del accidente, manifestó que se estaba sintiendo "cansado".
Tras su muerte, Campos fue relevado en la candidatura por su compañera como vicepresidente, la ecologista Marina Silva, quien terminó tercera en las elecciones del 5 de octubre.
EFE
