El secretario general del Movimiento Vanguardia Bicentenaria Republicana, Eustoquio Contreras aseguró este lunes que el “ataque” de Obama no es al Gobierno de Nicolás Maduro, sino “a la soberanía de la nación”.
En cuanto a la Ley Habilitante denominada Antiimperialista, aseguró que “que es una respuesta lógica porque es proporcionalmente a la agresión del presidente de los Estados Unidos. Barak Obama ha sido también habilitado legalmente para desarrollar una nueva etapa de la intervención de los asuntos internos de Venezuela”.
“El principio de soberanía y autodeterminación de un estado viene dado porque su jefe de estado sea proactivo y decida a quien solicitarle ayuda o no, es distinto el caso de los Estados Unidos de Cuba. A Cuba no solo se le ha aceptado ayuda, sino que se le ha pedido que se nos ayude, mientras que los Estados Unidos viene a poner de rodillas la dignidad y el gobierno de Venezuela”, aseguró.
Dijo que el proceso político venezolano busca una transformación estructural. “Los Estados Unidos asume una política para desarrollar la intención malsana de terminar de estrangular al país para que lleguemos a las elecciones en una condición desventajosa para la fuerza bolivariana, si esa es la lectura la respuesta tiene que ir en esa dirección”.
“En este momento tenemos que poner a raya al imperialismo, a sus aliados internos para mantener como objetivo estratégico la revolución, el ejercicio y el poder de cara a las elecciones parlamentarias”, apuntó.
Aseveró que “este ataque de Obama no es al Gobierno de maduro, es un ataque a la soberanía, a la seguridad de la nación que envuelve a todos los entes públicos y privados. Tenemos que tener la habilidad suficiente para incorporar a todo el mundo en este gran esfuerzo”.
En ese sentido, dijo: “Yo creo que el presidente Maduro está dando pasos importantes, la Habilitante hay que apoyarla porque es una manera de agilizar los mecanismo que ameritan poner en práctica, para darle respuesta a la acción de los Estados Unidos que es de intervención y de injerencia”.
“La verdad es que un proceso de transición tiene dificultades, que estamos desmontando el modelo capitalista. Hemos tenido problemas para la construcción del modelos socialista de producción”, manifestó.
Indicó que deben reconocer que “la corrupción heredada de la cuarta República no la hemos podido combatir con eficacia y hay nuevos focos de corrupción. Reconocer que no se la ha podido dar al pueblo lo que la Constitución nos ordena darle, que hacen falta niveles de unidad en los factores bolivarianos y revolucionarios, que a veces somos lentos en las respuestas populares”.
“Es preferible tener paciencia y permitir que se desarrollen las potencialidades del proyecto bolivariano, antes que correr el riesgo y volver al pasado”, destacó.