EL CLARIN- Cristina Fernández de Kirchner está en Italia con el claro objetivo de relanzar las relaciones comerciales y elevar un 50% el intercambio con el país que mañana festeja los 150 años desde la unificación del sur y el norte por el default argentino en 2002. Por eso fue recibida primero por el presidente, Giorgio Napolitano en el Palacio Quirnale, luego almorzó con el premier Silvio Berlusconi en el Palacio Di Chigi, también en roma. Berlusconi le obsequió dos copas de cristal veneciano y un chal negro.
En lo que fue el primer encuentro entre un mandatario argentino con un par italiano desde que en 2002 viajó Eduardo Duhalde, Cristina Kirchner afirmó que "las relaciones con Italia siempre tuvieron una fluidez muy importante" y comentó que el año pasado "el Gobierno lanzó el programa de financiamiento del Bicentenario y el préstamo más grande fue otorgado a una centenaria firma: Fiat-Argentina lo que demuestra que esta unidad entre Argentina e Italia no es solamente una cuestión que comienza hoy".
También, aprovechó para invitar a los empresarios a conocer el país, y como ya hizo en otras ocasiones, mencionó a la prensa al plantear que al venir, "si leen las tapas de los diarios quizás se lleven una impresión equivocada del país". "El default de la deuda en 2001 nos hizo caer en nuestra relación con Italia y del mundo, en el caso italiano, tal vez, fue más doloroso porque no es novedad de los lazos históricos, que fue la principal corriente migratoria de la Argentina", recordó.
Los piropos por parte de la Presidenta no tardaron en llegar: "El modelo italiano de desarrollo es un modelo a mirar e imitar, es único en lo que hace a que su sustento fundamental es la pequeña y mediana empresa, que significan el 50% de la exportación de Italia" señaló Kirchner, y dijo que en Argentina representan "el 15%, y si vemos que en Latinoamérica son el 5%, uno ve que estamos en un buen camino", definió.
En ese sentido, trajo a colación la visita hace pocos meses del presidente de Fiat, Sergio Marchionne, en la que "anunció una importante inversión en maquinaria agrícola", así como la fábrica Pirelli, "que estuvo a punto de cerrarse por la debacle pero anunció una inversión de 100 millones de dólares".
Lo que se dejó de lado fueron temas que no generan buen clima entre ambas naciones, como los aumentos de tarifas de empresas italianas en la Argentina, o las trabas comerciales. Sobre las tarifas, el ministro de Planificación, Julio De Vido dijo que no va a haber cambios de tarifa, y que no hay empresas discriminadas.
Cristina Kirchner asistirá mañana a la celebración de los 150 años de la unificación de Italia, donde asistirán los reyes de España y decenas de jefes de Estado.
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