Varias mujeres de Arabia Saudí han desafiado hoy supuestamente la prohibición de conducir impuesta por la monarquía ultraconservadora que rige el país, a juzgar por los mensajes dejados en Facebook, Twitter y otras redes sociales. La acción responde a la campaña Women2Drive que un grupo femenino árabe, animado por la ola de cambios en Túnez y Egipto, ha lanzado en Internet para que las mujeres saudíes logren que se les reconozca su derecho a conducir. El mes pasado, una mujer fue detenida por ponerse al volante e instar a otras a hacerlo.
Una joven que se identifica como Laila Sindi, de la ciudad costera de Yeda, asegura en Twitter que salió a primera hora de la mañana junto a una amiga y su prima en un vehículo descapotable y que las calles estaban tranquilas. "Volvemos del supermercado. Mi mujer ha decidido comenzar el día cogiendo el coche", escribe el editorialista Tawfiq Alsaif en Twitter. "Mi esposa, Maha, y yo regresamos de un paseo en coche de 45 minutos por las calles de Riad [la capital]", cuenta también en esa red social Mohammad al-Qahatani, presidente de la Asociación de Derechos Políticos y Civiles de Arabia Saudí.
Una mujer que se hace llamar Aziza Yusef y dice tener 54 años comenta que sobre las 11.00 condujo un vehículo por la calle Rey Fahd de Riad. "He pasado por delante de dos coches de policía y nadie me ha dicho nada", relata. Aparentemente, la primera mujer que ha desafiado la prohibición lo ha hecho de madrugada, mostrándolo en un vídeo colgado en la red YouTube. En la grabación, la conductora, que lleva un niqab (el velo que cubre toda la cabeza menos los ojos), enseña su teléfono móvil donde marca la hora y el día. "Queremos depender de nosotras mismas sin contar con conductores, tenemos derecho a conducir", dice la mujer antes de poner en marcha su vehículo por unas calles desiertas.
"Una barrera a su libertad de movimientos"
Ninguna ley escrita prohíbe conducir a las mujeres en Arabia Saudí, pero los principales clérigos del régimen han emitido varias fetuas -normas religiosas- en este sentido. En la práctica, las autoridades prohíben conducir a las ciudadanas y les niegan el derecho a obtener el carné, veto que se extiende a todas las extranjeras que viven en Arabia Saudí o visitan el país. Así las cosas, para poder desplazarse en automóvil las mujeres deben contratar a un chófer; si disponen de pocos recursos, dependen de la benevolencia de los miembros masculinos de la familia.
Destacados ulemas afirman que las mujeres al volante pueden crear "situaciones de tentación pecaminosa", en referencia a la eventualidad de que las conductoras tengan que interactuar con policías o mecánicos, en un país donde se practica la segregación sexual en la esfera pública, informa Ángeles Espinosa. Nadie parece reparar en la contradicción que supone compartir el pequeño espacio de un coche con un hombre ajeno a la familia al tener que recurrir a los servicios de un chófer.
"No permitir que las mujeres conduzcan supone una inmensa barrera a su libertad de movimientos y limita severamente su capacidad para llevar a cabo actividades diarias como ir al trabajo o al supermercado, o recoger a sus hijos del colegio", ha dicho Philip Luther, subdirector del programa de Amnistía Internacional para Oriente Medio y Africa del Norte.
El mes pasado, las autoridades de la ciudad de Al Khobar detuvieron a Manal al Sharif, una asesora de seguridad informática de 32 años, después de que hubiera conducido en más de una ocasión e instado a otras mujeres a hacer lo mismo a través de un vídeo colgado en la red YouTube. Al Sharif fue obligada a poner por escrito que no volvería a conducir y fue puesta en libertad 10 días después de su arresto. Desde su detención, varias mujeres han sido arrestadas por conducir y liberadas al poco tiempo después de forzarlas a firmar compromisos similares de cara al futuro.
Arabia Saudí es el único país del mundo donde las mujeres no tienen derecho a conducir.
Coincidiendo con esta jornada de reivindicación, la ONG Amnistía Internacional ha comenzado una "ciberacción" en la web www.actuaconamnistia.org dirigida al embajador en España de Arabia Saudí para que no arresten a las mujeres que quieran conducir. La organización pide que este país deje de tratar a las mujeres como ciudadanas de segunda fila y abra su red viaria a las conductoras. En la campaña promovida a través de Internet se pide a las mujeres con permisos de conducir internacionales que empiecen a conducir este viernes por las carreteras saudíes.
EL PAIS/ AGENCIAS