Según indicó hoy su oficina, la visita de Giffords tendrá carácter estrictamente privado y la congresista no comparecerá en público ni concederá entrevistas.
En un comunicado, el esposo de la congresista, el astronauta Mark Kelly, indicó que su mujer “lleva soñando con este viaje desde hace tiempo”, pues echa de menos su ciudad.
Los médicos, agrega Kelly, opinan que la visita podría desempeñar un papel importante en la recuperación de Giffords, que se esfuerza por poder hablar y caminar como lo hacía antes de quedar herida.
Giffords recibió el alta médica el pasado miércoles en el centro donde se encontraba ingresada en Houston (Texas), aunque seguirá recibiendo tratamiento diario como paciente externa.
La congresista demócrata resultó herida en el lado izquierdo de la cabeza mientras participaba en una reunión con votantes a la salida de un supermercado en Tucson (Arizona).
Giffords difundió por primera vez imágenes suyas tras el atentado el fin de semana pasado a través de la red social Facebook.
En las imágenes se ve a una Giffords sonriente, con el pelo más corto y más oscuro y en la que sólo su sien izquierda, más hundida, deja sospechar lo ocurrido el 8 de enero.
Seis personas, entre ellas una niña, murieron y otras doce resultaron heridas en el tiroteo que se atribuye a Jared Loughner, quien fue declarado recientemente incapacitado mentalmente por el momento para ser sometido a juicio.
