El reinició de las lluvias en el ya inundado departamento del Chaco, al occidente de Paraguay, ha generado el brote de una serie de enfermedades gastrointestinales, por lo que las autoridades han comenzado a tratar el agua con productors químicos que permitan asegurar su potabilización e iniciaron una jornada de vacunación masiva contra la influenza, la difteria, tétanos y neumococo.
El director de Vigilancia de la Salud de Paraguay, Iván Allende, reportó que ya se registran casos de diarrea, mordedura de víboras e insectos.
Por su parte, la viceministra de Salud, Raquel Escobar, enfatizó que existe un peligro por la aparición del cólera y de otras enfermedades infecciosas.
Escobar advirtió que las enfermedades "se pueden disparar en los lugares inundados", por lo que justificó la necesidad de mantener la ya declarada alerta sanitaria.
En la zona de Remansito, distrito de la ciudad de Villa Hayes, en las puertas del Bajo Chaco, permanece bajo el agua tras la fuerte precipitación registrada en las últimas horas.
El jefe de Operaciones de la Secretaría Nacional de Emergencia, Aldo Saldíver, declaró que esta situación ha complicado la asistencia aérea al departamento inundado, por lo que los helicópteros han tenido que retornar al Centro de Operaciones.
El pasado 19 de abril, el Ministerio de Salud de Paraguay decretó alerta epidemiológica para el departamento del Chaco con el objetivo de prevenir la transmisión de enfermedades.
Con este decreto la cartera de Salud también busca garantizar la asistencia sanitaria y evitar epidemias por el desplazamiento de personas, animales silvestres y hasta vectores.
(teleSur)