La práctica de embalsamar se remonta a los tiempos del antiguo Egipto y en ella que se utilizan sustancias químicas o resinas para evitar la putrefacción del cadáver.
Tras lavar el cuerpo con germicidas y limpiar los orificios de la nariz y la boca, se colocan algodones en las cavidades evitando la salida de fluidos y se sutura la boca para prevenir posibles contaminaciones.
A continuación se procede a masajear el cuerpo con el fin de eliminar la rigidez y mejorar el aspecto de la piel, con cremas o aceites.
Una vez preparado el cadáver se procede al vaciado. Se realiza una incisión en la arteria, se extrae toda la sangre y se introduce una solución de embalsamamiento, que generalmente es una mezcla de formol, agua y productos químicos, además de conservantes, fijadores, germicidas y colorantes similares al color de la sangre.
De este modo, el cuerpo recupera un tono natural, sin síntomas de cianosis y sin el aspecto azulado de la piel tras la muerte.
El conjunto de sustancias conservantes evitan la descomposición de los tejidos y los germicidas permiten que no se generen hongos ni moho.
Para evitar todo tipo de bacterias se suelen injertar grandes cantidades de alcohol, glicerol y formalina.
En el proceso de vaciado de la sangre y llenado del líquido de embalsamamiento, se emplean aparatos específicos como bombas de inyección y de aspiración.
Cuando los órganos están dañados, por haber padecido cáncer o diabetes, se inyecta el líquido directamente en la cavidad del órgano.
Si el cuerpo está hinchado por la quimioterapia o medicamentos, se emplearán sustancias que faciliten la eliminación de los líquidos y la hinchazón.
Mediante distintas técnicas se perfora el intestino grueso, la vejiga, el estómago y los pulmones, que una vez vacíos se rellenar con la solución.
Por último, gracias a la tanatoestética se procede a mejorar el aspecto general de la piel, así como de la cara, el pelo, las manos y las uñas.
Un cuerpo embalsamado necesita un mantenimiento constante, tiene que estar en un lugar frío y poco húmedo.
EFE