El gobernador del estado Miranda y excandidato presidencial, Henrique Capriles Radonski, informó sobre la impugnación de las pasadas elecciones que se llevó a cabo este jueves.
Se refirió a las declaraciones del ministro de Finanzas, Nelson Merentes y dijo que si se hubiese respetado la voluntad del pueblo, todos los trabajadores, públicos y privados, tendrían hoy 40% de incremento salarial. Añadió el tercer salario mínimo más bajo de América Latina.
Aseguró que de darse unas elecciones el próximo domingo, "no tengo dudas de que ganaríamos con más del 60% de los votos (...) daríamos una pela si fuesemos a un proceso electoral porque se siguen cayendo las mentiras (...) Nosotros seguimos hablando desde el lado de la verdad y esto no ha terminado, aquí nadie puede cansarse ni tirar la toalla (...) Esto es una lucha que va por capítulos".
Informó que este jueves "hemos presentado ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), para agotar las instancias correspondientes en nuestro país, el recurso contencioso electoral para impugnar las elecciones del 14 de abril".
Dijo que esperaban que el CNE "cumpliera con su palabra, honrara la palabra que le dio a los venezolanos y a los presidentes (...) El país completo pedía una auditoría, revisar las cajas y los cuadernos de votación, como se debe hacer siempre, el que no la debe, no la teme".
Calificó como "una burla" a los presidentes que se reunieron en Unasur para respaldar la auditoría el que no se haya cumplido con lo previsto y acordado. "No podemos ser parte de una farsa (...) Los que están en los poderes, no están por encima de los venezolanos", dijo.
Precisó que la presidenta de la Sala Electoral es militante del partido de Gobierno. "Yo espero doctora, con el mayor respeto, que usted se aparte del caso, igual el vicepresidente que fue diputado del MVR (...) Yo creo que ni una demanda de tránsito uno gana allí si no es del partido (...) Mi historia de vida es que por más adverso que pueda ser el sistema que usted tiene al frente siempre se termina imponiendo la verdad, pero nunca se debe dejar de luchar (...) Vamos a luchar con todo lo que nos permite la Constitución".
"Es una impugnación total del proceso electoral, no parcial (...) Hay más de 21 mil homónimos chequeados, más las planillas de incidencia, lo que nos hace concluir que la impugnación no podía ser parcial, ¿qué debería pasar? Una nueva elección presidencial", precisó Capriles.
Aseguró que agotará las instancias internas y también acudirá a las internacionales. "Cuando usted no lograr administrar la justicia, usted tiene el derecho de acudir a instancias internacionales, eso no es injerencia (...) Nuestro país formar parte del Sistema Interamericano de Derechos Humanos (...) Hay muchos precedentes, no es la primera vez que le toca a un pueblo lidiar con esta situación que nosotros tenemos".
Este miércoles durante la movilización por el Día Internacional del Trabajador, Capriles anunció la impugnación del resultado del proceso electoral ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) tras el rechazo del Consejo Nacional Electoral (CNE) de ejecutar una auditoría bajo las exigencias planteadas por el Comando Simón Bolívar.
En días previos al pronunciamiento del ente comicial, el gobernador de Miranda dio un ultimátum y aseveró que no participaría en una auditoría "chimba", es decir sin acceso a los cuadernos de votación, comprobantes, actas de escrutinio y verificación de duplicidad de huellas.
De acuerdo a información actualizada por el portal del CNE, entre Nicolás Maduro y Henrique Capriles existe una brecha de 1,49%. Maduro, quien ya fue juramentado como presidente electo, logró 7.586.251 votos (50,61%), mientras que Capriles obtuvo 7.361.512 sufragios (49,12%).
