El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, expresó preocupación este lunes por las restricciones puestas en práctica en varios países y localidades a las personas que regresan de los países más afectados por el ébola.
Ban sostuvo que esas medidas están siendo impuestas con mayor severidad sobre trabajadores de la salud y aquellos que han estado al frente de la respuesta contra la enfermedad.
El Secretario General subrayó que el personal médico que regresa es gente excepcional que está haciendo una enorme labor solidaria al servicio de la humanidad.
Enfatizó que no deben ser sometidos a restricciones que no están basadas en pruebas científicas y llamó a no estigmatizar a aquellos que desarrollan la enfermedad.
Ban Ki-moon reiteró que la mejor manera de proteger a un país contra el ébola es detener el brote en sus orígenes en África Occidental, para lo cual se requiere un apoyo excepcional de trabajadores médicos internacionales y en gratitud por sus servicios los países tienen la obligación de cuidar de ellos.