( AFP).- Simpatizantes del chavismo, convocados por el presidente Nicolás Maduro, marcharán este lunes por Caracas en repudio a las sanciones impuestas por Estados Unidos a funcionarios del gobierno venezolano acusados de violar derechos humanos de manifestantes de oposición.
Maduro llamó la noche del viernes a los militantes del oficialismo a marchar en protesta por el centro de la capital bajo el lema “A Venezuela se respeta” y para “repudiar el intervencionismo y la amenaza de los Estados Unidos” contra este país sudamericano.
La convocatoria coincide además con los 15 años de la promulgación de la Constitución promovida por el presidente Hugo Chávez (1999-2013), que impulsó un modelo socialista en Venezuela.La movilización está prevista para los 08H00 locales (12H30 GMT) y arrancará desde cuatro puntos en el centro y oeste de la ciudad, desde donde los manifestantes se dirigirán a la céntrica avenida Bolívar.
Aunque el chavismo acostumbraba a convocar manifestaciones, después de las protestas antigubernamentales registradas de febrero a mayo pasados que dejaron 43 muertos, las movilizaciones callejeras oficialistas se redujerony no han movilizado a grandes multitudes, en medio de un contexto de caída de la popularidad de Maduro a menos de 30%.
El pasado miércoles, el Congreso estadounidense aprobó sanciones contra altos funcionarios venezolanos señalados de cometer violaciones contra los derechos humanos de opositores durante las protestas.
“Indignación y repudio”
Maduro inicialmente dijo que esas sanciones serían en represalia por el encarcelamiento y juicio de opositores, entre ellos el dirigente radical Leopoldo López, encarcelado en el penal militar de Ramo Verde en las afueras de Caracas desde febrero pasado.
“Indignación y repudio es lo que siente nuestro pueblo frente a las amenazas de la Casa Blanca. (Están) desesperados porque los hemos derrotado en este 2014 y vamos a seguir derrotando a sus títeres, al neofascismo de la derecha”, advirtió Maduro días atrás.
Leopoldo López fue uno de los principales promotores de las manifestaciones opositoras callejeras bajo la consigna llamada “La salida”, que demandaba la renuncia de Maduro a través de la movilización popular. El líder opositor fue acusado por la fiscalía de incitar a la violencia.
“Las sanciones son una amenaza para ver si quebrantan la moral de oficiales líderes de nuestras Fuerzas Armadas (…) ya develamos en marzo un golpe de Estado gracias a la lealtad de los oficiales”, precisó Maduro.Maduro precisó que las sanciones de Washington también obedecían a que un grupo de militares venezolanos denunció en marzo un supuesto golpe de Estado orquestado desde Estados Unidos, que contemplaba bombardeos aéreos contra objetivos en Caracas, como el Palacio de Miraflores, el ministerio de Defensa o la sede de la cadena de TV multiestatal Telesur.
Estados Unidos, pese a comprar a Venezuela unos 800.000 barriles diarios de petróleo y derivados en 2014 –un tercio de las exportaciones petroleras venezolanas– y ser su primer cliente petrolero casi a la par con China, mantiene relaciones tensas con Caracas.
La tirantez diplomática ya provocó que en 2010 se retiraran los embajadores, y causó en los últimos dos años las expulsiones de al menos ocho diplomáticos estadounidenses.