Si un espectador quiere ver un partido de fútbol o una carrera de Fórmula Uno desde su casa, probablemente quiera un enorme televisor que le permita seguir al detalle su deporte favorito.
Pero, ¿y si el público que asiste al evento pudiese tener una TV de bolsillo y no perderse nada tampoco?
Conjugar la emoción de vivir el espectáculo en persona y la precisión de las retransmisiones es lo que pretende la startup española Viuing, que ha diseñado un televisor de cartón para que sea vendido entre el público que asiste a los grandes eventos deportivos.
El dispositivo será algo más grande que la caja de un CD, será de un solo uso y su precio rondará los 15 euros (US$17).
La compañía tiene previsto sacarlo a la venta el próximo verano boreal.
“Va a ser la primera tele portátil que retransmita en tiempo real todo lo que está ocurriendo”, asegura Marc García, CEO de la compañía.
“Los espectadores adquirirán el dispositivo al entrar al espectáculo y no sólo podrán seguir la retransmisión, sino que les proporcionaremos todo tipo de estadísticas relacionadas con lo que están presenciando”, le cuenta a BBC Mundo.
¿Por qué no un teléfono?
Pero, ¿por qué utilizar Viuing y no una tableta electrónica o un smartphone?
García considera que estos dispositivos no pueden ofrecer las mismas prestaciones.
Por un lado, “estos productos pueden dañarse al aire libre y agotan sus baterías muy pronto”, asegura.
“Un dispositivo de este tipo conectado a un streaming (un tipo de transmisión de datos) puede durar una media hora”.
García explica que su tecnología permitirá una autonomía de seis horas: “Suficiente para cualquier evento de esta índole”.
Además, advierte de que en aglomeraciones de público la señal se cae con frecuencia.
La idea de Viuing es tener su propia señal con una serie de antenas en los recintos deportivos.
¿Y qué pasa al final del evento?
Cuando termine el espectáculo deportivo, el público podrá optar por quedarse el televisor desechable de recuerdo (pues tendrá una serigrafía conmemorativa) o podrá devolverlo a un contenedor.
Según explica la empresa, prácticamente todos sus componentes (de cartón y plástico) serán reciclados por su personal, con la excepción de las baterías, que “como en cualquier dispositivo, no son reciclables en sí mismas y necesitan un tratamiento especial”.
Lo que la compañía hará es contratar a empresas especializadas en su reciclaje, que separan sus elementos para reutilizar todo aquello que puede ser aprovechable.