La justicia francesa condenó este jueves a 23 años de prisión a una mujer por haber ahogado a dos hijos bebés, cuyos cadáveres fueron encontrados en 2013 en su propio congelador, hechos similares a un primer infanticidio en 2002 que ya le valió una condena precedente.
Audrey Chabot, de 34 años, vestida con un traje oscuro, se mantuvo callada durante la lectura del veredicto, en el que el Tribunal de lo Criminal de Bourg en Bresse (centro de Francia) le impuso igualmente la obligación someterse a un tratamiento médico, informó una periodista de la emisora "France Info".
La Fiscalía había solicitado para ella 27 años de cárcel, de los cuales dos tercios de obligado cumplimiento en prisión.
Fue el padre biológico de los dos bebés muertos -que no conocía su existencia- el que descubrió los cuerpos en el congelador de Chabot el 24 de marzo de 2013 una noche que acudió a la casa de la mujer en la que estaba el hijo de ésta, que tiene ahora 15 años.
El hombre explicó que abrió el congelador para preparar algo de cenar para el niño, sacó dos paquetes y, después de tratar de abrir el primero con un cuchillo, se dio cuenta de que en el segundo se veía el cráneo de un recién nacido.
La defensa de la mujer, que había pasado ocho años en prisión por un anterior infanticidio (salió en libertad en 2010), dijo que su comportamiento era más patológico que criminal.
El perito psiquiatra que la examinó consideró que Chabot no sufre ni esquizofrenia, ni psicosis, ni ninguna forma de locura, aunque reconoció que tiene "una personalidad frágil, inestable y vulnerable".
EFE