La gigante brasileña de la construcción Odebrecht afirmó que la detención hace tres días de su presidente y de otros ejecutivos por el escándalo de corrupción en Petrobras es “totalmente innecesaria e ilegal”.
“La policía federal no presentó, como está expuesto en la decisión judicial, ningún hecho nuevo que justifique las medidas de fuerza cumplidas, totalmente innecesarias y, por eso mismo, ilegales”, señaló la empresa en un aviso pago publicado en la prensa brasileña este lunes.
Mayor constructora de Brasil, Odebrecht “expresa su indignación con las órdenes de prisión de cinco de sus ejecutivos y de búsqueda y aprehensión en algunas de nuestras empresas”, añadió el comunicado.
La empresa ya había manifestado el viernes su rechazo a las detenciones.
La policía detuvo ese día al presidente de Odebrecht, Marcelo Odebrecht, considerado el principal empresario de Brasil, y a otros ejecutivos de la firma por su supuesta participación en la trama de corrupción en la petrolera estatal Petrobras, un escándalo que estalló hace más de un año y que tiene ramificaciones empresariales y políticas.
Otra docena de personas también fue detenida el viernes, entre ellos Otávio Azevedo, presidente de otra gigante de la construcción, Andrade Gutierrez, la segunda mayor de Brasil. Todos los detenidos el viernes deben comenzar a declarar ante la policía federal este lunes y podrían ser acusados formalmente esta semana, según la prensa local.
El procurador Carlos dos Santos Lima dijo el viernes que ambas empresas “capitaneaban un esquema de cártel dentro de Petrobras”. En esta nueva fase de la investigación, la policía investiga delitos de formación de cártel, fraude en licitaciones, corrupción, desvío de fondos públicos y lavado de dinero.
El sábado la calificadora Moody’s revisó a la baja las notas de crédito de las dos compañías, que son además las dos mayores empresas de construcción e ingeniería de América Latina.
Con altas conexiones políticas en el gobierno brasileño, Odebrecht tiene presencia en 21 países, desde Alemania, Angola, Estados Unidos, hasta Venezuela. En Cuba, la empresa está a cargo de la revitalización del estratégico puerto de Mariel.
Odebrecht facturó unos 40.000 millones de dólares el año pasado.
La operación “Lava Jato” (lavado de coches) develó en marzo de 2014 una red de sobornos en Petrobras que costó más de 2.000 millones de dólares a la estatal.
El fraude se estructuró en torno a un “club” de empresas que amañó licitaciones para adjudicarse obras contratadas por la petrolera entre 2004 y 2014. Según confesiones de varios investigados, los sobornos eran destinados a financiar partidos políticos y a engrosar fortunas personales de los involucrados.
Fuente: AFP