El ministro de Cultura de Ecuador, Guillaume Long, aseguró en una entrevista a EFE que las críticas recientes al Gobierno forman parte de una transformación social del país y de las “viejas oligarquías”, y consideró que el posible desgaste del presidente Rafael Correa debe medirse en las urnas.
Desde que Correa ganara las elecciones presidenciales de 2006, su popularidad ha ido en paralelo a los cambios económicos y sociales -con un aumento medio del PIB del 4,2 % desde 2007-, aunque los primeros meses de 2015 se caracterizan por un aluvión de críticas frente a algunas reformas, que han puesto en pie de guerra a distintos sectores, acusados de “golpismo” por el Gobierno.
Long aseguró a EFE que las críticas son el resultado de una transformación social que se enmarca en un proceso político “ambicioso y radical” en el que una mayoría, en especial los sectores más pobres, “se han beneficiado de este cambio”.
“Nosotros hemos disminuido 20 puntos la pobreza, 11 la extrema y somos de los pocos países en el mundo que hemos reducido el GINI (índice de desigualdad) en ocho puntos, algo absolutamente admirable pero que implica una transformación de la sociedad en la que se afectan intereses y sobre todo privilegios”, explicó.
Entre los asuntos candentes se encuentran dos leyes de carácter fiscal, la ley de herencias (que aplicará una tasa de entre el 2,5 % y el 77,5 % a los beneficiaros) y la de plusvalía (con la que se pretende “eliminar la especulación”) y una de contenido político, para posibilitar que los cargos políticos puedan ser reelegidos de forma indefinida.
El ministro, de viaje en Francia para visitar el célebre Festival de Aviñón de teatro, prefirió no aventurar una futura candidatura de Correa para 2017, aunque admitió que si el mandatario sufre un posible desgaste deberá ser la ciudadanía la que decida en las urnas.
Fuente: EFE