El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) reveló este miércoles datos que revelan que ocho menores mueren o quedan mutilados en Yemen cada día a causa del violento conflicto en ese país.
Desde que empezaron los enfrentamientos en abril pasado han muerto casi 400 menores y 600 más han resultado heridos. Los que sobreviven están amenazados por la desnutrición y las enfermedades.
La interrupción de los servicios médicos, el cierre de escuelas y el reclutamiento de niños por grupos armado son consecuencias de una crisis que en Yemen afectan además de forma terrible a la infancia, subrayó UNICEF.
El portavoz de esa agencia, Simon Ingram, explicó que unos diez millones de niños precisan ayuda humanitaria urgente, y recordó que más de 13 millones de personas han abandonado sus hogares huyendo de la violencia.
"Una de las niñas con quienes hablamos tenía nueva años, Latifa. Describió cómo estaba jugando con sus hermanas cuando estallaron las bombas a su alrededor. Dijo que no se podían ver debido al polvo que las rodeaba, no podía respirar. También contó lo aterrorizada que se sintió y cómo rezó por protección", apuntó Ingram.
Por otra parte, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) destacó los obstáculos que afronta su personal para asistir a la población necesitada y alertó de la posibilidad de una hambruna si no se reciben los fondos suficientes para aliviar las necesidades más agudas.