El presidente en funciones del Gobierno español, Mariano Rajoy, dijo el martes que no ve otra salida que celebrar nuevas elecciones en Cataluña, después de que el bloque independentista de la región se fracturó en su debate sobre si apoya a Artur Mas como líder del nuevo Ejecutivo.
Cataluña ha sido incapaz de formar gobierno desde los comicios de septiembre por desacuerdos entre los partidos secesionistas vencedores. Si no se elige un nuevo candidato antes del sábado, se convocarán automáticamente nuevas elecciones regionales.
La imposibilidad de formar un gobierno catalán se asemeja al estancamiento político que sufre España a nivel nacional tras el incierto resultado de los comicios del 20 de diciembre y aumenta la posibilidad de que los españoles vuelvan a las urnas en 2016.
"No sé lo que se podrá hacer en el plazo de cinco días (...) yo creo que en este momento lo mejor era que el señor Mas abandonase sus planteamientos independentistas. Creo que eso no va a ser posible y yo, que soy contrario a que se produzcan elecciones cada media hora, creo que lo segundo mejor sería que se celebrasen elecciones", dijo Rajoy en una entrevista radial.
Los infructuosos intentos de elegir presidente en Cataluña dañaron a un movimiento separatista que en su punto álgido congregó a un millón de personas en las calles de Barcelona, al tiempo que puso en evidencia las divisiones de sus seguidores.
La perspectiva de nuevas elecciones en Cataluña aumenta la probabilidad de repetir los comicios nacionales, ya que la disminución de la amenaza de un gobierno catalán secesionista fuerte podría reducir la presión sobre el Partido Popular (PP) de Rajoy y la oposición socialista para formar una gran coalición que haga frente a un Ejecutivo catalán separatista.
Los mercados de bonos reaccionaron el martes de forma positiva a la división del bloque y el rendimiento de las notas de Cataluña a cinco años cayó a un mínimo de tres semanas, a pocos puntos básicos de su nivel más bajo en cerca de cinco meses.REUTERS