Científicos encontraron una nueva forma no invasiva de detectar anormalidades genéticas en los embriones obtenidos con fertilización in vitro (IVF, por sus siglas en inglés).
Actualmente este tipo de diagnóstico prenatal se lleva a cabo tomando células del propio embrión, lo cual puede ponerlo en riesgo.
Pero los investigadores de la Universidad de Oxford, Inglaterra, afirman que es posible llevar a cabo las mismas pruebas de diagnóstico tomando células del área que rodea al óvulo fertilizado, las cuales normalmente se desechan.
Esta prueba puede indicar si el bebé tiene riesgo de desarrollar trastornos debidos a anormalidades en el cromosoma, como el síndrome de Down.
La investigación fue presentada durante la conferencia de la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología que se celebra en Estocolmo, Suecia.
Actualmente las parejas que llevan a cabo tratamientos de fertilización deben someterse a un diagnóstico de preimplantación genética (DPG), una de las pruebas para seleccionar al mejor embrión para ser implantado en el útero de la madre.
El DPG consiste en hacer una biopsia al óvulo fertilizado para comprobar que no tiene anormalidades cromosómicas, como una copia adicional del cromosoma 21 que causa el síndrome de Down.
Este procedimiento, sin embargo, es costoso, invasivo y puede dañar al óvulo o embrión.
Tal como informó la doctora Elpida Fragouli, quien dirigió el estudio, "los óvulos están rodeados por una nube de células, llamadas células del cúmulo".
"Las células del cúmulo rutinariamente se separan de los óvulos durante los tratamientos de IVF y a menudo son desechadas, por lo cual es muy fácil obtenerlas para analizarlas", dice.
Los investigadores examinaron las células del cúmulo de 26 mujeres sometidas a DPG antes del tratamiento de IVF.
Descubrieron que las anormalidades en estas células parecían coincidir con los errores genéticos que se encontraban en los óvulos que anteriormente habían estado rodeando.
Calidad cromosómica
"Todavía estamos en el proceso de establecer la utilidad de estos genes como marcadores no invasivos del estado cromosómico del óvulo y de su calidad" señala la investigadora.
"Sin embargo, es interesante notar que varios de estos genes están involucrados en funciones celulares vitales de las células del cúmulo y del óvulo que rodean, como la comunicación entre las células, la respuesta hormonal y la muerte celular".
"Así que este hallazgo podría ofrecer información útil sobre los orígenes genéticos de las anormalidades del cromosoma", agrega.
Por su parte, el experto en fertilidad británico Stuart Lavery, afirma que esta prueba "sería mucho más barata, mucho menos invasiva y algo que podría tener una buena aplicación clínica".
"Potencialmente lo que nos permitirá hacer es tener la capacidad de elegir al mejor embrión procedente del mejor óvulo, lo cual significa que eventualmente podríamos llevar a cabo una transferencia de un solo embrión".
Actualmente se implantan varios embriones en el útero para incrementar las probabilidades de éxito, pero esto incrementa también el riesgo de múltiples nacimientos lo cual puede poner en peligro tanto a la madre como a los bebés.
Si se lograra implantar un solo óvulo fertilizado en el útero se evitarían estos riesgos.
BBC
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