(AFP) – El presidente de Honduras, Porfirio Lobo, instaló este sábado una mesa de diálogo con varios partidos políticos sobre una Asamblea Constituyente, una propuesta similar a la que formuló el ex presidente Manuel Zelaya y por la que fue derrocado el 28 de junio de 2009.
Al diálogo asiste Zelaya, quien es el líder del recién conformado Frente Amplio de Resistencia Popular (FARP), desde el cual buscará retornar al poder si en Honduras son aprobadas las enmiendas constitucionales que permitan la reelección.
Lobo aseguró que junto a la propuesta de una Constituyente están circulando al menos otras dos iniciativas para reformar la Constitución, una impulsada por el ex presidente hondureño Rafael Callejas (1990-1994) y una tercera de la cual declinó dar detalles.
“A mí esa fiesta de consultar a la gente me encanta”, manifestó Lobo recientemente.
“Algunos (cambios) se harán en el Congreso y otros se tendrán que consultar con el que todo lo decide y que tiene el poder de esa decisión que es el pueblo hondureño”, sostuvo.
“Lo que yo voy a hacer, mientras se debate el tema de las constituyentes y esas cosas, es ir avanzando en los diálogos, que serán diálogos políticos con los diferentes grupos y partidos para que me digan qué reformas quieren que se hagan en Honduras“, explicó Lobo, quien ganó las elecciones de noviembre de 2009 y asumió el gobierno el 27 de enero de 2010.
Zelaya dijo que su propuesta inmediata es que Honduras celebre una consulta popular.
“Nuestra demanda principal es por una convocatoria a un plesbicito, a una consulta, para que el soberano decida si quiere quitarse esa camisa de fuerza que nos dejaron los constituyentes de los años 80″, dijo.
El ex gobernante aseguró que el pueblo debe decidir la convocatoria a una Constituyente y no los poderes del Estado.
“Eso solo lo decide el soberano y hay que consultarle. Y eso está en los documentos que usted presidente Lobo firmó en el acuerdo de Cartagena de Indias”, aseguró Zelaya en la actividad en la casa presidencial de Honduras.
Zelaya indicó que la consulta es indispensable y que la exigen maestros, campesinos, obreros y todos los sectores sociales que reclaman el espacio que según él necesitan.
“Estamos encerrados en una armazón de hierro y no se pueden limitar las facultades del soberano para autoconvocarse y escoger el país que desean tener”, puntualizó.
Zelaya fue derrocado por un golpe de Estado encabezado por los militares con el aval del Congreso y la Corte Suprema el día que intentaba celebrar una consulta popular declarada ilegal por la Justicia y el Congreso, con el fin de cambiar la Constitución y poder acceder a un nuevo mandato.
Retornó a Honduras el 28 de mayo pasado luego de la firma de un acuerdo de reconciliación con el presidente Lobo en la ciudad colombiana de Cartagena, a orillas del Caribe, bajo mediación de Colombia y Venezuela.
Ese convenió facilitó la readmisión de Honduras en la OEA y el regreso del ex mandatario tras 16 meses de exilio en República Dominicana.
