El satélite de rayos X alemán Rosat, fuera de servicio desde 1999 pero aún en órbita, impactará contra la Tierra entre el 20 y el 25 de este mes en un punto aún sin determinar, informó hoy a Efe el Centro Aeroespacial Alemán (DLR).
"Realizamos observaciones a diario para definir la fecha y el lugar del impacto", señaló Andreas Schütz, portavoz del DLR, con sede en Colonia.
Por el momento, los expertos tan solo pueden precisar que el Rosat caerá sobre la Tierra entre el 20 y el 25 de octubre, con un margen de error de más o menos tres días, y entre los 53 grados de latitud norte y los 53 grados de latitud sur.
Conforme se acerque el día del impacto, mayor será la precisión para calcular el lugar concreto y el momento, que un día antes será de más/menos cinco horas.
La posibilidad de que alguno de los restos del Rosat cayera sobre una persona es de una entre 2.000, estiman los expertos del DLR.
Durante su misión, entre 1990 y 1999, el Rosat giró alrededor de la Tierra en un una órbita elíptica a una distancia de entre 585 y 565 kilómetros de la superficie terrestre.
Desde que fue puesto fuera de servicio, el satélite alemán pierde altura continuamente debido a la fricción con la atmósfera terrestre, de manera que a principios de septiembre pasado, la distancia con la Tierra se había reducido hasta unos 290 kilómetros.
Cuando el Rosat ingrese en la atmósfera a una velocidad de 28.000 kilómetros por hora, el satélite se romperá en pedazos y la mayor parte se desintegrará debido al extremo calor generado por el rozamiento.
Sin embargo, los últimos análisis señalan que hasta 30 pedazos con una masa total de 1,6 toneladas (principalmente restos del espejo del telescopio, muy resistente al calor) podrían precipitarse sobre la superficie terrestre.
"Realizamos observaciones a diario para definir la fecha y el lugar del impacto", señaló Andreas Schütz, portavoz del DLR, con sede en Colonia.
Por el momento, los expertos tan solo pueden precisar que el Rosat caerá sobre la Tierra entre el 20 y el 25 de octubre, con un margen de error de más o menos tres días, y entre los 53 grados de latitud norte y los 53 grados de latitud sur.
Conforme se acerque el día del impacto, mayor será la precisión para calcular el lugar concreto y el momento, que un día antes será de más/menos cinco horas.
La posibilidad de que alguno de los restos del Rosat cayera sobre una persona es de una entre 2.000, estiman los expertos del DLR.
Durante su misión, entre 1990 y 1999, el Rosat giró alrededor de la Tierra en un una órbita elíptica a una distancia de entre 585 y 565 kilómetros de la superficie terrestre.
Desde que fue puesto fuera de servicio, el satélite alemán pierde altura continuamente debido a la fricción con la atmósfera terrestre, de manera que a principios de septiembre pasado, la distancia con la Tierra se había reducido hasta unos 290 kilómetros.
Cuando el Rosat ingrese en la atmósfera a una velocidad de 28.000 kilómetros por hora, el satélite se romperá en pedazos y la mayor parte se desintegrará debido al extremo calor generado por el rozamiento.
Sin embargo, los últimos análisis señalan que hasta 30 pedazos con una masa total de 1,6 toneladas (principalmente restos del espejo del telescopio, muy resistente al calor) podrían precipitarse sobre la superficie terrestre.
EFE