No se aleja de los escándalos. Tras posar desnuda para la revista Playboy, la cantante estadounidense Lindsay Lohan vuelve a captar la atención de la prensa internacional, al intentar asistir a la fiesta privada del estreno de la última película de Clint Eastwood, “J. Edgar”.
Según recoge el portal mexicano El Universal, Lohan insistió en ingresar a la recepción realizada en el hotel Hollywood Roosvelt (una de las tantas actividades del Festival de Cine AFI), a pesar que su nombre no figuraba en la exclusiva lista de invitados.
Una fuente replicada por la publicación explica que Lindsay empezó a discutir con el equipo de seguridad, asegurando que ella tenía que ver a Leonardo Di Caprio, protagonista del film.
Cuando la dejaron ingresar, Lindsay Lohan trató de llegar hasta su colega, pero él estaba rodeado por su propia seguridad y un gran grupo de amigos que le hizo difícil cumplir su misión: tomarse una foto juntos.
El portal indica además que cuando la actriz finalmente logró hacer contacto con Di Caprio, a través de uno de sus ayudantes, él estaba conversando con Clint Eastwood y Dustin Lance Black y no quiso ser interrumpido.
TGG