ROMA, 17 enero 2012 (AFP) – Transcripción textual del diálogo entre
el capitán de puerto, Gregorio De Falco, y el comandate del “Costa
Concordia” que naufragó
la noche del viernes cerca de la isla italiana del Giglio, Francesco
Schettino.
De Falco: Le habla De Falco desde Livorno, ¿estoy hablando con el
comandante?
Schettino: Sí, buenas noches comandante De Falco
De Falco: Dígame su nombre, por favor.
Schettino: Soy el comandante Schettino, comandante.
De Falco: ¿Schettino? Escuche Schettino. Hay gente atrapada a bordo. Usted
vaya con su bote bajo la proa del barco, del lado derecho. Ahí hay una escalera
de cuerdas. Suba por ella, vaya a bordo del navío y dígame cuánta gente
queda. ¿Está claro? Estoy grabando esta comunicación, comandante
Schettino…
Schettino: Comandante, le digo una cosa…
De Falco: Hable más alto. Ponga la mano delante del micrófono y hable más
alto. ¿Está claro?
Schettino: En este momento, el barco está inclinado…
De Falco: Ya lo sé. Escuche, hay gente bajando por la escalera de proa. Usted
haga el recorrido inverso por esa misma escalera, suba al navío y dígame
cuántas personas hay y qué tienen a bordo. ¿Le queda claro? Dígame si
hay niños, mujeres o personas que necesiten asistencia. Y dígame el número
exacto de cada una de estas categorías. ¿Está claro?
Mire Schettino que usted tal vez se haya salvado del mar, pero ahora le va a
ir mal… Yo voy a hacer que lo pase muy mal. Vaya a bordo,
¡Carajo!
Schettino: Por favor comandante…
De Falco: Nada de por favor… Ahora mismo vaya usted a bordo. Júreme que esta
yendo a bordo…
Schettino: Estoy yendo con la lancha de rescate, aquí estoy, no estoy
yendo a ninguna parte, estoy aquí…
De Falco: ¿Qué está haciendo comandante?
Schettino: Estoy aquí para coordinar el rescate…
De Falco: ¿Qué va a estar coordinando ahí? Vaya a bordo. Coordine el
rescate desde a bordo. ¿Usted se está negando?
Schettino: No, no me estoy negando.
De Falco: ¿Usted se está negando a ir a bordo, comandante? Dígame por qué no
va.
Schettino: No estoy yendo porque la otra lancha está aquí
parada…
De Falco: Usted vaya a bordo, es una orden. No tiene nada más que
hacer. Usted ha declarado el abandono de la nave, ahora mando yo.
¡Vaya a bordo! ¿Está claro? ¿No me oye? Vaya y llámeme directamente
desde a bordo. Los medios de rescate aéreo ya están allí.
Schettino: ¿Dónde están los medios de rescate?
De Falco: Están en la proa. Adelante. Ya hay cadáveres, Schettino
Schettino: ¿Cuántos cadáveres hay?
De Falco: No sé… Sé que hay uno. Eso oí. Pero es usted el que me
tiene que decir cuántos son, ¡Cristo Bendito!
Schettino: ¿Pero no se da cuenta de que aquí está oscuro y no vemos nada?
De Falco: ¿Y que usted se quiere volver a su casa, Schettino? ¿Está oscuro y
por lo tanto quiere volver a su casa? Suba a la proa del navío por la
escalera y dígame qué se puede hacer, cuántas personas hay y qué
necesitan. ¡Ahora mismo!
Schettino: Estoy con el segundo comandante
De Falco: Entonces suban los dos (…) Usted y el segundo, suban a bordo, ahora
mismo. ¿Está claro?
Schettino: Comandante, yo quiero subir a bordo, pero el otro bote aquí… Hay
otros socorristas, se detuvo y no se mueve de aquí. Llamé a
otros socorristas…
De Falco: Hace una hora que me está diciendo lo mismo. Ahora vaya a bordo. ¡A
bordo! Y dígame inmediatamente cuántas personas hay.
Schettino: Está bien, comandante.
De Falco: ¡Vaya ahora mismo!