Alrededor de 60 personas murieron hoy en Siria a causa de los bombardeos del Ejército nacional y los enfrentamientos entre las fuerzas del régimen y grupos rebeldes armados, informaron los principales movimientos de oposición.
Según los Comités de Coordinación Local (CCL), 67 personas, entre ellas diez menores y tres mujeres, perdieron la vida, cifra que el Observatorio Sirio de Derechos Humanos estableció en 52 civiles y 26 miembros de las fuerzas gubernamentales.
Las supuestas bajas del Ejército sirio no han sido confirmadas ni desmentidas por fuentes oficiales.
Las zonas más castigadas fueron las provincias de Idleb (norte), Deraa (sur), Homs (centro) y localidades de la periferia de Damasco (centro).
De acuerdo con las fuentes, fuerzas leales a Al Asad lanzaron una ofensiva contra la localidad de Jan Sheijun, feudo de los opositores en Idleb, en la que murieron al menos siete personas, entre ellas una mujer y un niño.
Un activista sobre el terreno, identificado como Mohamed Abu Abdu, informó a Efe vía internet que la localidad está sometida a un "bárbaro e indiscriminado bombardeo" que comenzó el martes y todavía continúa.
Los heridos son atendidos en hospitales de campaña en los alrededores de la población, denunció Abu Abdu.
En los alrededores de Damasco, los grupos opositores denunciaron la muerte de una docena de personas a causa de los bombardeos y ataques que sufren varias poblaciones de la zona, entre ellas Duma, Zamlaka y Al Rihan.
En la provincia meridional de Homs, fuerzas gubernamentales sitiaron este miércoles la ciudad de Al Quseir y destruyeron varias viviendas, atacadas con tanques y helicópteros artillados.
Según el CCL, tropas terrestres intentan irrumpir en la localidad pero se han topado con la resistencia de los rebeldes del Ejército Libre Sirio, con los que han entablado duros combates.
En la misma ciudad de Homs, tres civiles y cuatro rebeldes perdieron la vida por bombardeos y enfrentamientos en los barrios de Al Jalediya, Yaura al Shiah y Karam Sham.
De acuerdo al Observatorio, los combates más cruentos entre los insurgentes y las tropas regulares, que sufrieron importantes bajas, se registraron en Idleb, Deir el Zur (este), la periferia de Damasco y Homs.
EFE
