AFP).- La reina Sofía de España realizó este miércoles un recorrido por el centro ceremonial de Tiwanaku, antigua cultura preincaica que se extendió por Bolivia, Chile y Perú, en la tercera jornada de una visita oficial de cinco días al país, tal y como verificó la AFP.
La soberana española recorrió el centro ceremonial de Tiwanaku, a 70 km de la Paz y 4.000 metros de altitud, donde se encuentran importantes construcciones líticas como Kalasasaya, la pirámide de Akapana, el templete de Puma Punku y la afamada Puerta del Sol, trabajada en una sola pieza de piedra andesita.
Acompañada por el ministro boliviano de Culturas, Pablo Groux, la reina española compartió, más tarde, un almuerzo con autoridades de Tiwanaku, un poblado ubicado en una impresionante explanada del altiplano.
La reina Sofía, ataviada con un poncho de lana de alpaca, un auquénido andino, también participó de un ritual aymara con la quema de una “mesa” o “wajta”, compuesta de raíces, dulces y frutas como símbolo de agradecimiento a los dioses andinos.
Previamente la soberana fue declarada huésped ilustre de la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, donde recorrió las instalaciones de la escuela pública España, donde los niños le brindaron un caluroso recibimiento.
Además, un grupo de mujeres aymaras le rociaron la cabeza con mixturas de color (papel picado) y le rodearon el cuello con una colorida guirnalda de flores, rompiendo todo protocolo.
Ésta es la quinta vez que la soberana española visita Bolivia y en uno de sus viajes, en la década de los noventa, aceptó apadrinar la boda de una indígena quechua, promesa que cumplió representada por el embajador español de entonces.
El martes la soberana asistió, acompañada del presidente de Bolivia, Evo Morales, a la firma de un memorando para estudiar la restitución al país sudamericano de parte de un tesoro compuesto por monedas de oro y plata descubierto en un galeón español hundido en el siglo XIX.
El memorando se compromete “a trabajar proactivamente en la reposición de parte de este hallazgo histórico” y significa “un poco de recompensa por aquella riqueza que ha trasladado convivir a otras latitudes y ha dejado postergación y pobreza a las faldas de la montaña de plata” de Potosí, señaló el ministro Groux.
La reina de España y su comitiva tienen previsto visitar este jueves y viernes las misiones de Chiquitos, reducciones jesuíticas en el este del país, así como la ciudad de Santa Cruz, motor del desarrollo económico de Bolivia