Tres menores de 16 y 17 años fueron detenidos en México y acusados de asesinar a siete personas y quemar sus cadáveres mientras trabajaban para un cártel de narcotraficantes, informaron hoy fuentes oficiales.
La detención de dos adolescentes varones de 16 y 17 años y de una mujer de 17 fue hecha por agentes de la Policía de Caminos, en una fecha no precisada, en el municipio de Abasolo, en el estado de Nuevo León, en el norte del país.
Según dijo a Efe un portavoz de la Seguridad Pública Estatal, los dos hombres confesaron que estaban comandados por la menor, haciendo labores de vigilancia a policías de la zona y también estaban encargados de asesinar y quemar con gasolina a sus víctimas.
La fuente señaló que los policías sorprendieron en actitud sospechosa a uno de ellos en un camino vecinal, quien después de ser interrogado delató a sus cómplices, que se encontraban a unos metros de distancia y que también fueron detenidos.
Al ser interrogados, describieron que las personas a las que secuestraban eran asesinadas y sus cuerpos lanzados a un pozo, en el que rociaban gasolina y prendían fuego.
Se informó que la joven de 17 años era quien se encargaba de abastecer el combustible para que ellos, junto a otros delincuentes, que se encuentran prófugos, hicieran dicha labor.
La fuente no detalló a qué organización criminal pertenecían, aunque medios de comunicación locales dijeron que eran presuntos miembros de Los Zetas, un cártel de narcotraficantes que destaca por la crueldad de sus métodos.
Según la Seguridad Pública Estatal, a los detenidos les decomisaron tres armas largas de uso militar con 4 cargadores, 173 balas, un chaleco antibalas y un equipo de comunicación.
Además les fueron encontrados un automóvil, una camioneta y un camión de carga, vehículos con reporte de robo y en donde había contenedores con gasolina.
Los menores informaron a las autoridades del lugar en donde quemaban los cuerpos de sus víctimas. Allí se encontraron restos óseos que serán analizados por Servicios Periciales, agregó la fuente.
El uso de menores es frecuente entre los grupos del crimen organizado de México, en la mayoría de los casos como vigilantes o distribuidores de droga
EFE