Después del festín del jueves, el "viernes negro" de estampidas en las tiendas y el "sábado de los negocios pequeños", los consumidores estadounidenses se preparan hoy para el "ciberlunes", en el cual se intensifica el comercio por internet.
La temporada de compras de fin de año comenzó este noviembre aún más temprano, en la noche misma del Día de Acción de Gracias, y tuvo el viernes una jornada pujante, aunque todavía el comercio no ha calculado los negocios de ese día.
El sábado, el presidente de EE.UU., Barack Obama, y su familia concurrieron a una librería en Arlington (Virginia) dentro de lo que se ha instituido como el día de compras en los negocios pequeños, para preservarlos de la asfixia con que les amenazan las grandes cadenas de minoristas.
Esperan ventas por 2 mil millones de dólares
El "ciberlunes", que se inició hace siete años, debería ser la señal de largada para el gran comercio por internet y se calcula que mañana habrá ventas por unos 2.000 millones de dólares, aproximadamente el 3 % del comercio en la temporada de compras y ventas que ha casi sustituido a varias celebraciones familiares y religiosas.
Algunos analistas creen que el "ciberlunes" está perdiendo importancia: millones de consumidores ya han aprendido la táctica de compras que consiste en recorrer las tiendas, comparar precios en sus teléfonos y tabletas portátiles y ordenar los productos en el mejor precio que encuentren.
Para eso no esperan al "ciberlunes". Y más y más compradores esperan más allá del "ciberlunes" pues saben que la tiendas -las de local con paredes y estanterías o las que despachan pedidos cibernéticos- bajarán sus precios al aproximarse Navidad y Fin de Año.
"El "ciberlunes" ha pasado de moda", dijo Fiona Dias, estratega principal de ShopRunner.com, un servicio que ofrece la entrega en dos días de artículos adquiridos por internet.
"Ha pasado de moda porque si un minorista planifica la venta de 1.000 aparatitos en un período de cinco días con descuento del 20 %, y los ha vendido todos para el sábado, ya no necesita vender más con descuento del 20 % el lunes", explicó Dias al diario USA Today.
Por otra parte los consumidores que se han habituado al "ciberlunes" se encuentra este año con una sorpresa: por primera vez desde el surgimiento del comercio internauta los residentes en California, Texas y Pensilvania deberán pagar impuesto estatal a las ventas por sus compras en línea.
Los comerciantes, de todos modos, volcaron hoy en su publicidad en diarios, revistas, la televisión, la radio y todos los medios cibernéticos una avalancha de ofertas.
La cadena de tiendas de artículos para oficina Staples promete descuentos de hasta el 45 % en las cámaras de fotos y video y las computadoras de escritorio, y la cadena Sears promete descuentos que van desde el 10 % al 40 % en su vasta variedad de artículos.
EFE