En un comunicado, Ban expresó consternación ante la masacre y repudió una vez más todo acto de violencia contra la población civil.
Asimismo, reiteró que los autores de este y todos los crímenes cometidos en Siria deben ser procesados ante la justicia.
"Esos incidentes terribles deben ser un recordatorio para todos de la urgencia de poner fin al conflicto y emprender una transición política hacia una nueva Siria donde todas las comunidades gocen de protección, derechos y libertades", puntualizó Ban.
Según informó el gobierno sirio, más de 40 personas –en su mayoría alauitas – murieron a manos de elementos de un grupo armado presuntamente integrista sunita. ONU