Así celebró el Manchester City el título de la Premier League

AFP

Ancelotti: "Las cuentas las haremos después del día 24"

Ancelotti, crítico: "Hemos regalado dos goles. Después lo hemos intentado pero ha sido un partido difícil. Estamos decepcionados porque hemos perdido la Liga. Después de la semifinal hemos perdido la intensidad. Ahora tenemos que descansar y preparar la final".

Destacó la recuperación de dos jugadores importantes: "Khedira y Arbeloa han estado muy bien, con intensidad. Tendrán minutos también contra el Espanyol".

El Madrid, ya pendiente de la Champions: "No voy a pensar ahora si la temporada es buena. Tenemos la oportunidad de cumplir un sueño del madridismo. Las cuentas las haremos después del día 24".

El galés no jugó: "Bale no estaba bien, tenía un golpe y he preferido no arriesgar". CR7, listo: "Cristiano está recuperado, llegará a tope dentro de 15 días. Creo que podrá jugar contra el Espanyol".

Destacó la capacidad del técnico del Celta: "Ha jugado muy bien con Luis Enrique. Es un entrenador óptimo".

No tiene favorito para el título: "Me da igual que gane la Liga el Barcelona o el Atlético".

Martino: "Este partido será especial, necesitamos su apoyo"

Martino, expectante de cara a la última jornada: "Se dieron los resultados para llegar a lo que queríamos: jugarnos el título en el último partido".

La afición, fundamental: "Soy de pedir poco a la gente, pero este partido es especial y necesitamos su apoyo".

Así vio a su equipo en Elche: "Hemos jugado un partido con mucho corazón, no sé si nos ha faltado fútbol pero lo hemos dado todo"

Mascherano: "Para algunos quizás sea nuestro último partido en el Barça"

Mascherano dejó una reflexión al final del partido: "Para algunos quizás sea nuestro último partido en el Barça".

La última jornada el conjunto azulgrana se puede proclamar campeón: "Sólo nos sirve la victoria pero hace una semana hubiéramos firmado llegar así."

Gabi: "Nos dejaremos la vida en el Camp Nou"

Gabi se mostró triste por no poder lograr el título ante su público: «Una pena no haber ganado. Hemos perdido una gran oportunidad para que disfrutaran nuestros aficionados que tanto nos apoyan cada jornada».

Espera el Barcelona en su feudo: «Hay que ganar allí. Vamos a ir a ganar. Nuestros jugadores se están dejando la vida cada jornada y también nos la dejaremos en el Camp Nou». MARCA

2-0: El Madrid sigue en caída libre

Real Madrid está en caída libre y no da síntomas de que vaya a reaccionar. Desde que ganó al Bayern de Munich en la Champions, el equipo blanco ha desaparecido por completo del mapa. Empató ante el Valencia en el Bernabéu y perdió en Valladolid y en Vigo. Tres partidos en los que el Real Madrid ha perdido la Liga y ha llenado su enfermería con ilustres como Cristiano Ronaldo, Benzema, Di María o Bale. Aunque lo peor para los blancos no es eso, que ya es. Lo peor es que ante Valladolid y Celta, la imagen que dio el Real Madrid ha sido muy pobre, de un equipo apático, sin ambición y con la mente puesta en la final de Lisboa del próximo 24 de este mes de mayo. Todo el madridismo confía que todo eso cambie ante el Atlético en esa final de la Champions League porque si no lo hace, la Décima tendrá que esperar ya que tal y como está este Madrid, conquistar la Copa de Europa se antoja imposible.

Es cierto que el Real Madrid saltó a Balaídos dispuesto a redimirse del ridículo que hizo ante el Valladolid en la segunda mitad. Con un equipo repleto de suplentes por culpa de las lesiones, como Casemiro, Nacho o Morata, más los reaparecidos Khedira y Arbeloa, los de Ancelotti buscaron imponerse al Celta de un Luis Enrique en el que estaban puestas muchas miradas, especialmente de los azulgrana ya que el año que viene, salvo sorpresa, será el nuevo técnico del Barça. Su Celta, la verdad es que juega bien, al toque y está liderado por un Rafinha que fue el gran protagonista del inicio de un encuentro que conforme pasaban los minutos se iba haciendo muy aburrido con contadas llegadas peligrosas a las porterías de Diego López y Sergio Álvarez. Sin embargo, cuando todo parecía que se iba a llegar sin goles al descanso, Sergio Ramos falló ante la presión de Charles que se fue hacia Diego López para poner el 1-0 en el marcador. El defensa blanco se quejó de una falta en el robo de balón de Charles, pero el colegiado no lo vio así porque, entre otras cosas, no lo era.

Al descanso se llegó con esa victoria momentánea del Celta ante un Real Madrid que salió en la segunda parte a darle un vuelco al resultado y, sobre todo, al partido. Los de Ancelotti salieron a por todas y tuvieron ocasiones claras para marcar, pero no era su día. O no acertaban o lo sacaba la defensa del Celta y si no, el portero. La sensación era que el Real Madrid estaba cerca de empatar a pesar de que no estaba fino. Y pudo hacerlo si el árbitro hubiese señalado un penalti a Modric que pareció muy claro. Los blancos eran superiores al equipo gallego que buscaba la sentencia a la contra, aunque con muy poco éxito o buscando un penalti como Charles en una acción con Diego López que no era.

Sin embargo, cuando todo parecía que era el Madrid el que iba a empatar, fue el Celta el que puso el 2-0. Otro fallo garrafal de los blancos, en esta ocasión de Xabi Alonso, y la picardía de Charles a la hora de robar un balón propició el segundo tanto del equipo gallego en el minuto 63. Ahí se acabó el encuentro para un conjunto blanco al que no siquiera le quedó el pundonor de apelar a la épica para buscar lo imposible. Ancelotti, muy dado a enviar mensajes con los cambios, también lo hizo en Balaídos. Sacó a Willian José como último recurso y dejó a Bale en el banquillo. O lo que es lo mismo, tal y como estaba el partido, no iba a arriesgar al galés, una de sus estrellas, y perderlo para la final de la Champions League.
La recta final del encuentro fue de locura, sin tácticas, sin esquemas y con llegadas a las dos áreas. Los porteros se convirtieron en protagonistas con notables intervenciones y con un poste incluido de Bermejo. Así acabó este encuentro en el que el Real Madrid demostró que sigue sin recuperarse porque tiene puestas todas sus energías en la final de Lisboa

pata en Elche pero se jugará la Liga en el Camp Nou

La Liga se decidirá en el Camp Nou. Después de 37 jornadas tan enrevesadas y emocionantes como agónicas, el Barça será campeón si logra ganar al Atlético en la última jornada. No le valdrá el empate. A los rojiblancos, que no pasaron del empate ante el Málaga, sí les será suficiente. Los azulgrana se lo jugarán al todo o nada. El Estadi deberá ser mágico como en las grandes noches. Tocará hablar al equipo pero también a la grada.

El inesperado giro del destino proporcionó una segunda oportunidad al Barça. Volvió deprisa y corriendo a engancharse a la Liga pero no supo hincarle el diente. El partido en Elche fue tan dramático como toda la temporada y la igualada sin goles final alivió por el tropeizo Atlético en el Calderón pero frustró, de nuevo, por la ocasión malgastada.

El dispositivo táctico de Tata Martino fue lo más identificativo pero lo menos relevante. Era una Liga de dos jornadas y poco importaba el sistema o la elección de los jugadores. Ganar o ganar, no había otra ecuación. Daba igual si Cesc por Xavi, si con los extremos más abiertos o Messi bien enfocado entre líneas. La Liga se había perdido dos veces y no era cuestión de desdeñar una tercera ocasión. Y el Barça trató de no repetir la historia.Intenso, profundo y atrevido, el Barça se afanó en orientarse hacia el gol. El Elche era un libro abierto, con dos segmentos defensivos alrededor de Manu Herrero, y los azulgrana no tardó un cuarto de hora en atisbar la portería. Un chut de Iniesta que el meta desvió al travesaño avisó de las intenciones de culés. El equipo de Tata Martino sabía lo que se estaba jugando y no escatimó esfuerzos. Con un Pedro menos entonado pero con Alexis poderoso en la elección de las jugadas, el ataque azulgrana puso peligro suficientes. Un par de chuts de Messi, uno desde fuera del área y otro de falta, y dos cabezazos de los extremos alimentaban las aspiraciones del título. En la banda, Tata Martino aplaudía al tiempo que corregía la retirada cuando el Elche daba señales de acometida, que fue en pocas ocasiones, la verdad. El Elche aleccionó al Barça sobre el arte de defender. No es casual que los ilicitanos sean el segundo equipo menos goleado en su estadio. Estaban enchufados, no era un problema de actitud sino de acierto.

¿Cuestión de tiempo?

Para los locales, que claman por la permanencia, el escenario del partido era un suplicio. Bien atrás pero inefectivos adelante. Y viendo las ganas azulgrana, tiritaban pensando en el momento en que el Barça iba a ser capaz de sacar el lático.

Con la reanudación, Messi se plantó en la portería. Nada hacía pensar que el partido se iba a convertir en un calvario. Dominaba pero no era suficiente. Tocaba y tocaba el balón hipnotizando al Elche pero los desajustes ponían en peligro el triunfo. Daba la sensación de que en cualquier momento caería en la desesperación. Iniesta , Busquets y en ocasiones Cesc aguantaban de pie. Quedaba media hora para el final y el Barça se impacientaba. El fugaz recuerdo de Granada planeó por el banquillo. Se imponía con autoridad como entonces pero era incapaz de marcar. Los transistores y el run run de la grada anunciaban la debacle del Madrid aunque no del Atlético. Estaba en sus manos y a pesar de algunos contragolpes ilicitanos, el tanto era cuestión de tiempo. Un nuevo movimiento del banquillo ponía un 2 en el Calderón. El Barça se aturulló y Pinto también, con un clamoroso error que el Elche no supo aprovechar. Los azulgrana cayeron en una precipitación extraña. Jugaban con un pinganillo en la oreja y no le iba bien. Cabeza, cabeza pedía Tata. Cabeza, cabeza, transmitía Mascherano. Una mano de Damián barriendo el balón, un penalti clarísimo no señalado por Teixeira Vitienes, enrabietó más al equipo que se lanzó como un poseso a por el triunfo.

La Liga tenía buen aspecto. Había entrado Tello -Tata olvidó rencillas- y sólo quedaba materializar el dominio. Con el Elche metido en su portería, el reloj iniciaba una agónica cuenta atrás. Nervios, muchos nervios, tanto que Rodriguez pudo enviar a la basura la Liga. Desperdició el gol pero no la permanencia, porque la Liga es suya. Ante tanto revoltijo, Xavi sustituyo a Cesc para poner pausa e ideas, hasta entonces inexistentes. Era un ataque y gol desesperado. Un gol, sólo uno ante el equipo menos goleado de la segunda vuelta pero no se dio con el antídoto. Las buenas noticias que llegaban desde Madrid pillaron al equipo camino desl vestuario.

1-1: El Atleti se estrella contra Caballero

Increíble. El Atlético tocó la Liga con la palma de las manos. La tuvo cerca, muy cerca. El Barça no fue capaz de derrotar al Elche en el Martínez Valero. Pero es que el conjunto rojiblanco tampoco pudo con el Málaga en el Calderón. Un Málaga que salió a lo suyo. Con cinco defensas atrás, dejando claro desde el inicio que no iba a regalar nada. El problema lo tenía el Atlético. De él dependía. Estaba en su mano. Y no lo aprovechó. Jugó mal, pero tuvo ocasiones de sobra para ganar el partido y, por consiguiente, la Liga. Unas veces Caballero y otras la falta de puntería condenaron a los rojiblancos. Eso. y un garrafal error en defensa que permitió al Málaga adelantarse en el marcador. Comenzado por Toby, que falló al despejar un balón, seguido por Courtois, que salió mal, y corroborado por Miranda, que llegó tarde. 0-1 para los andaluces en el minuto 67.

Antes, el Atlético, intenso como casi siempre, pero bloqueado, como casi nunca. ponía más corazón que cabeza a sus acciones. Y casi le da resultado. A los siete minutos, concretamente, cuando en un córner, el mayor de los Teixeira no se comió unas manos de Eliseu. O poco después, cuando Raúl García peinó un balón para dejar solo a Villa ante Caballero. El Guaje, que seguía gafado, la mandó al larguero. Y después Koke y Raúl García pudieron desnivelar la balanza. Ambos en el borde del área pequeña, el vallecano con el pie y el navarro con la cabeza, y sin oposición, la mandaron fuera.

Estábamos en el minuto 67. Con un desolador panorama en el Manzanares. El gol del Málaga había caído como tres jarros de agua fría en el Calderón. No era para menos. Rostros de desolación. Y sobre todo, de incredulidad. Eso no podía estar pasando. Pero pasaba. Toby, que ya la había pifiado en el primero, pudo aumentar la pena colchonera con una mano en el área que tampoco vio Teixeira. Con Tiago, desconocido, perdiendo balones fáciles en la medular, el Atlético había tocado fondo.

Así que la cosa sólo podía mejorar. Eso pensaron Simeone, sus jugadores, con Sosa, Diego y Adrián ya en el campo, y los aficionados. Era el momento de creer. Villa estuvo a punto de empatar en una jugada ensayada, pero volvió a toparse con Caballero. El asturiano estaba para estos partidos, pero ni ante el Levante ni ayer pudo demostrarlo. En ese córner, Alderweireld se resarció, a medias, marcando de cabeza el empate. Estalló el Calderón. Y se vino arriba el equipo. 
De ahí al final, el Atlético asedió al Málaga, que defendía el empate con uñas y  diente. Angeleri fue expulsado por doble amarilla, y el cuadro madrileño se volcó aún más si cabe. Sosa, en el 90’, y de falta directa (así dio un título a Simeone con Estudiantes) rozó un gol que muchos cantaron en el Calderón por el efecto óptico. Siguieron apretando los rojiblancos, que conocieron en su descuento que el partido del Barça había acabado. Y tuvo otra el Atlético. La última. En botas de Adrián, que tras regatear, buscó la escuadra. Y de nuevo, Caballero metió una mano salvadora para celebrar la acción como si de la final de la Champions se tratase. Se acabó. Desolación en el Manzanares. Al Atlético se le escapó la Liga. Pero de momento. Falta una final 

Barça y Atlético se jugarán la Liga

El empate del Atlético de Madrid y del Barcelona y la derrota del Real Madrid en Vigo hace que el conjunto blanco ya no tenga opciones matemáticas a optar por la Liga y deja al Barcelona y los 'colchoneros' dependiendo de sí mismos. El título está en sus manos y se jugarán el campeonato liguero a una sola carta, en el último choque en el Camp Nou.

El máximo de puntos que puede alcanzar el Real Madrid son los 87, que conseguiría con un triunfo en la última jornada ante el Espanyol, por lo que ya no alcanzará los 89 que tiene actualmente el Atlético. Los blancos estarán pues a la espera tan sólo del segundo puesto, ya que con un triunfo ante el Espanyol y una derrota del Barça en la última fecha de campeonato se pondrían por delante de los azulgrana, por tan sólo 1 punto.

Este es el único caso en que el Madrid puede alcanzar la segunda plaza, ya que un empate del Barça le haría perder en este contexto, ya que el Barcelona ganó los dos enfrentamientos directos ante el Madrid en la presente Liga.

El conjunto blaugrana tan sólo conseguiría el título si gana su último partido: el Barça-Atlético de Madrid de la última fecha de campeonato. Con una victoria, los hombres de Martino igualarían al Atlético con 89 puntos y ganarían la Liga por diferencia de goles respecto al cuadro rojiblanco, gracias al empate a 0 conseguido en el Calderón en el choque de ida. Si el Atlético ganara optaría a los 92 puntos, consiguiendo el campeonato con 5 puntos de ventaja respecto al Madrid, si los blancos ganaran al Espanyol.

El Barcelona lo tendrá complicado, después de no haber conseguido ganar al conjunto colchonero en ninguno de los seis encuentros disputados entre ambos en este curso (2 en Liga, 2 en Copa del Rey y 2 en Champions League). Los primeros cinco enfrentamientos acabaron en empate: 1-1 en la ida de la Supercopa en el Calderón, 0-0 en en la vuelta de dicho título en el Camp Nou, empate a 0 en la el partido de la primera vuelta de la Liga en el Calderón y empate a uno en los cuartos de final de Champions disputados en el Camp Nou.

El único de los dos equipos capaz de ganar ha sido el Atlético, con un triunfo por 1 a 0 en la vuelta de cuartos de final de Champions League que dio el pase a las semifinales a los colchoneros.

Esta situación deja a Barça y Atlético con toda la presión en un último partido de infarto. Una final que sin embargo encara con más posibilidades el Atlético de Madrid, ya que un empate ante el Barça le seguiría dando el título, con 92 puntos, 3 por encima de los azulgrana y 5 por encima del Madrid, que de ganar al Espanyol, en este caso, sería el segundo clasificado.

Lucha por el descenso: Málaga, Espanyol y Elche, salvados.

La lucha pro el descenso está más emocionante que nunca. Osasuna ha podido empatar su encuentro ante el Espanyol para intentar luchar por no descender y se ha colocado con 36 puntos. Los navarros aun tienen opciones de mantenerse en Primera División, ya que el Granada, con 38 puntos, es el equipo que marca la salvación.  

Uno de los partidos con más tensión ha sido el Granada-Almería, con resultado de 0 a 2 a favor del conjunto visitante. El Amería es uno de los conjuntos más beneficiados de la jornada, adelantando a Granada y Valladolid para eludir el descenso. Con 39 puntos si consigue este triunfo. El equipo andaluz sería uno de los cuadros más beneficiados de la jornada.

El Getafe, perdiendo en el Coliseum Alfonso Pérez, se podía haber complicado mucho el mantenerse en Primera División, con 37 puntos. Pero Escudero ha puesto el 1 a 0 con un buen disparo desde fuera del área y se ha colocado con 39 puntos, dando un gran paso adelante en sus aspiraciones por la permanencia.

Partido loco entre Sevilla entre el Betis y el Valladolid. El equipo visitante parecía que podía coger más aire ganando al Betis por 1-2 en la primera mitad, pero los verdiblancos, ya en Segunda, han conseguido poner el 2 a 2 en la segunda parte. Un emocionante choque en que Javi Guerra ha puesto el 2 a 3 en el minuto 57. A un cuarto de hora por el final, Rubén castro ha dejado helados a los vallisoletanos con el 3 a 3. El equipo visitante se complica las cosas en la clasificación, ya que ve como el Getafe y el Almería le avanzan en la clasificación. 

Con estos resultados, Almería, Getafe y Granada dependen de sí mismos para mantenerse en la Liga BBVA la siguiente campaña.

Clasificación Provisional por el descenso 

12. Málaga 42
13. Espanyol 42
14. Elche  40
15. Almería 39
16. Getafe 39
17. Granada 38
18. Valladolid 37
19 Osasuna 36

20 Betis