La Miss Universo 2013, Maria Gabriela Isler, manifestó su agradecimiento a la Organización Miss Venezuela y Cisnero Media por el apoyo y el recibimiento que le dieron tras su llegada a la nación.
“Para mi fue muy emocionante revivir y sentirme venezolanaviendo a esos niños cantando. Fue un espectáculo muy bonito que me hizo llorar como una niña chiquita” expresó Isler.Durante la ceremonia del Miss Venezuela 2014, el cantante zuliano Omar Acedo junto a un grupo de niños, y con la coreografía del ballet de Venevisión, le dieron la bienvenida oficial a la soberana universal.
Recordó que al concursar en el Miss Universo representó con orgullo a su país, “Yo no era Maria Gabriela Isler, yo era Venezuela. Sé que ustedes estuvieron apoyándome durante el certamen y el volver a escuchar mi joropo, mi música, me emocionó”.
Comentó que tras bastidores en la noche más linda de la belleza, muchas de las concursantes le preguntaban sus secretos y su experiencia durante su reinado, “yo les decía, mi secreto es que yo descubrí que soy feliz conmigo misma; como ser humano, con mi físico, mi personalidad. No dejé que nadie influyera a donde yo quería llegar aunque la gente a veces no confíe en uno. Ese es mi consejo, confiar en uno mismo”.
El Miss Universo le permitió crecer como persona y como ser humano, desarrollandose en actividades sociales a nivel mundial y llevando la bandera de su país en espacio que necesitaban paz y alegría, “lo más bonito de ser Miss Universo es llegar a cada lugar y ver cómo las personas se alegraban nada más con vernos y sonreirles”.
Resaltó que al finalizar su reinado universal quisiera continuar trabajando por la humanidad “yo soy soñadora, a mi me encantaría estar en la ONU, apoyando a mi país, y diversas causas para los derechos humanos”.
Sin embargo, informó que por ahora continúa apoyando a una organización católica en donde ha podido realizar obras sociales, “descubrí esa pasión en el Miss Universo y soy feliz haciéndolo”.
En los próximos días regresará a Estados Unidos para continúar su agenda social, por ahora se despidió diciendo: “Gracias a los 30 millones de venezolanos que somos, que me han apoyado, me han querido a través de mis redes sociales, les mando mis energías, mis oraciones, y todo lo bonito que siento por Venezuela (…) Los quiero, los llevo en el alma y nos veremos muy pronto porque les queda María Gabriela Isler para rato”.
