Una situación irregular fue registrada este miércoles en horas de la tarde en la sede de la Policía Municipal de Tinaquillo estado Cojedes, donde tuvo que intervenir el Grupo Anti Extorsión y Secuestro (GAES) y el Destacamento 322 del CZ 32 GNB, quienes actuaron de
manera inmediata para controlar el motín.
Fue a través de las redes sociales donde empezó a correrse el rumor de que se había generado un motín en el recinto policial por parte de unos imputados, que están recluidos por no haber espacios en la sede de la de la policía del estado ni en otras cárceles por estar abarrotados de reos. Tal rumor generó caos entre familiares y amigos de los detenidos e inclusive de familiares de los funcionarios de esa sede, ya que se hablaba de 5 muertos entre ellos un policía y una de las cocineras del lugar.
El escenario se tornó violento y tenso. Al parecer, la rebeldía de unos reos fue lo que provocó el alboroto y en medio de eso, el incendio de unas motos que habían sido recuperadas y estaban a la orden de la Fiscalía, aunque fueron varias las versiones dadas en las afueras de la sede policial de parte de familiares de los detenidos, unos que por cierto se encontraban dentro al momento de la visita que realizan los días miércoles y domingo.
Versión de los hechos
Una primera versión es la que se escuchaba de los familiares, quienes decían que el tumulto se generó porque un funcionario le había faltado el respeto a una dama que visitaba a su esposo detenido, a quien supuestamente le había dicho “que me miras becerra”, ésta le lanzó un refresco al funcionario y de allí comenzó la pelea.
La detención de una dama con presunta droga generó la revuelta
La versión oficial y confirmada por algunos familiares que se encontraban en el horario de visita, es que a una ciudadana, esposa de un imputado pretendía pasar dos envoltorios de regular tamaño de presunta marihuana y un envoltorio más pequeño dentro de un hielo que llevaba a su esposo, razón por la que fue llevada hacia la oficina de investigación, y el esposo al percatarse de la situación comenzó a pelear, siendo apoyado por el resto de los reos, quienes iniciaron la revuelta.
Fueron las autoridades del GAES y de la Guardia Nacional Bolivariana quienes lograron imponer control; tras la llamada que hiciera el director de la sede policial, Domanar Pérez. También es importante destacar la participación de los Bomberos quienes respondieron al llamado para apagar el incendio de las motos, así como también los funcionarios del 171 Tinaquillo, quienes llegaron para atender a los heridos en caso de haberlos, aunque se confirmó que un solo funcionario resultó quemado tratando de sacar una moto que se estaba incendiando evitando que se propagara el fuego hacia otro lote.
El mayor Leal, comandante del GAES Cojedes, confirmó que el orden interno produjo la detención de la ciudadana quien fue a visitar a su esposo pero con algunas sustancias prohibidas y fue esa situación que provocó que los reos intentaran formar un motín, que afortunadamente no generó víctimas que lamentar, sino bienes materiales causados por los reclusos.
Leal, pidió calma a los familiares de los presos que se hicieron presentes al igual que el Mayor Urosa, comandante del Destacamento Nº 32 de la Guardia Nacional Bolivariana, quienes insistieron en decir que como representantes de cuerpos de seguridad no agredieron a nadie, manifestando que su intervención de controlar y resguardar la vida tanto de los presos como de los funcionarios policiales y de todo aquel que se encontraba en el recinto, información con la que trataban de calmar la masa enardecida y preocupada, por la integridad física de sus familiares.
“Todos somos humanos, nadie está matando a nadie, todo lo que hicimos fue por mantener el control de la situación”, aseveró Leal. El funcionario castrense insistió en decir que no hubo hecho que lamentar a pesar de que dañaron candados, tumbaron rejas, quemaron sábanas, colchonetas y motos, de las cuales algunas son de la sede policial y otras que se encuentran a la orden de la Fiscalía del Ministerio Público.
El representante del GAES, recalcó que hay muchas maneras para controlar un motín y que nadie les iba a enseñar cómo hacerlo, pero sí dejó muy en claro en reiteradas oportunidades que no hubo heridos y mucho menos personas fallecidas.
Por otra parte, el comandante de la Policía Municipal, Domanar Pérez, detalló que el motín tal cual lo expresó el Mayor Leal, se debió a la detención de la esposa de uno de los detenidos a quien se le incautó presunta marihuana.
Agregó, que el caso fue remitido a la orden de la Fiscalía de Flagrancia del Ministerio Público. “Acá sólo tomamos acciones para restablecer el orden en el comando, tomando en cuenta que uno de los nortes como agentes policiales es respetar los derechos humanos”.
Afirmó, que los reos prendieron fuego a un total de cinco motos, luego de que acabaran con la reja del calabozo, para luego prender fuego con la gasolina de las mismas motos, recuperadas por la referida sede policial.
“Para el momento, eran cinco detenidos quienes estaban esperando para recibir las visitas y fueron quienes comenzaron el motín, apoyado por los otros reos. Hubo disparos para controlar, pero todos fueron de escopeta con cápsula de plásticos, usadas sólo para controlar la situación”, resaltó el comisario Pérez.
La autoridad de la Policía Municipal, dejó muy en claro que una situación de esa magnitud nunca se había generado en su sede, asegurando que es primera vez que se presenta una situación tan irregular, por lo que aprovechó para explicar que la policía que comanda no es suficientemente grande para mantener a tantas personas en el calabozo.
Familiares manifiestan preocupación y culpan al Presidente del circuito Judicial Penal de Cojedes
Los familiares en las afueras de la sede no dejaron de manifestar descontento y rabia por la situación, algunos de ellos se mostraron molestos por el problema generado y por el daño que les pudo haber causado el simple hecho de que esa dama introdujera esa presunta droga.
Por otro lado manifestaron inconformidad por la manera en que duermen los 17 detenidos, alegando que unos lo hacen en colchonetas y otros en hamaca. “Nosotros estamos agradecidos del trato del comisario Domanar, quien siempre ha mostrado respeto y consideración por nuestros detenidos, cómo es posible que tengan que dormir 17 personas en un calabozo que debe medir cuando mucho 2X3, no es justo ellos están hacinados y la culpa se la echamos al presidente del circuito judicial penal, quien no hace nada o no ha tratado de buscarle una solución a esta situación tan irregular”, destacaron algunos familiares para finalizar.
ELN