El Secretario General de la ONU y la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) acogieron con beneplácito las conversaciones directas entre el gobierno de ese país y representantes del Talibán, celebradas ayer martes en Islamabad, Pakistán.
Al final de la reunión, los representantes del gobierno afgano y el Talibán acordaron continuar el diálogo después del fin del Ramadán.
Ban Ki-moon agradeció el compromiso de las partes y volvió a pugnar por un proceso de paz liderado por los afganos.
Ban también encomió el papel constructivo de Pakistán.
Por su parte, la UNAMA urgió a las partes a tomar las medidas que siguen hacia la reconciliación y la paz.
El jefe de la Misión, Nicholas Haysom, aseguró que los afganos desean poner fin a la violencia constante que afecta todos los aspectos de sus vidas.
Advirtió, no obstante, que las conversaciones fueron solo el primer paso de un proceso que puede ser largo y lleno de desafíos.