Megan Fox anunció su separación con Brian Austin Green, pero meses después descubrió que estaba embarazada y ahora es él quien rompió el silenció y admitió que no estaba planeado llamar a la cigüeña.
A medios estadounidenses el actor admitió que el bebé es suyo, pero al igual que sus otros hijos, jamás fueron planeados, y sólo toma la noticia como sorpresa de que a sus 43 años siga siendo fértil.
Con este giro, personas cercanas a la pareja aseguran que Brian y Megan están trabajando para volver a estar juntos por el amor que alguna vez tuvieron y para mantener una familia unida.
Pese a las buenas noticias, el divorcio tras 5 años de matrimonio sigue en marcha que beneficiará a la ex estrella de ‘Beverly Hills, 90210’ ya que le costaría a Megan 72 millones de dólares, más de la mitad de su fortuna EFE