Desde el Complejo de Jose en Anzoátegui, el ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, aclaró que Venezuela no aceptará que le digan con quien se relaciona el país y agradeció a los trabajadores la concentración en apoyo a la estatal venezolana, tras la sanción impuesta a PDVSA por el Departamento de Estado norteamericano.
“El ataque de Venezuela es un ataque contra la Organización de Países Exportadores de Petróleo (…) No le gusta al imperialismo que nos relacionemos con Libia, no le gusta que nos relacionemos con Irán, no le gusta que nos relacionemos con Cuba, pues señores del imperialismo van a tener que quedarse con las ganas porque nosotros vamos a seguir avanzado en la unidad con los países petroleros", aseguró.
Aseguró que la empresa petrolera “está en movilización” y los trabajadores “más unidos que nunca”. “Nuevamente pretenden agredir a nuestro país (…) Abrogándose pretensiones imperiales y un conjunto de sanciones contra nuestra empresa nacional Petróleos de Venezuela, la nueva Pdvsa”, denunció.
Hizo un llamado a los trabajadores a prepararse a defender la soberanía y profundizar la batalla para que el presidente Chávez gane nuevamente las elecciones en 2012. “A nosotros nadie nos va a imponer la manera de actuar, nosotros somos hijos de Simón Bolívar (…) Se volvió a equivocar el gobierno yanqui con nuestro gobierno”, dijo.
De igual manera, criticó que la oposición se negara a suscribir un documento para rechazar las sanciones impuestas a Venezuela.
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