Las autoridades sanitarias estadounidenses aprobaron la primera válvula artificial que puede reemplazar una válvula aórtica dañada sin necesidad de recurrir a cirugía a corazón abierto.
La Administración de Alimentos y Medicinas de Estados Unidos (FDA, por su sigla en inglés) dio el visto bueno al transcatéter Sapien (THV) fabricado por Edwards Lifescience pero aclara que será para pacientes que no se pueden someter a una operación a corazón abierto.
La estenosis de la válvula aórtica es una enfermedad progresiva, relacionada con la edad causada por depósitos de calcio que hacen que la válvula se estreche.
El estrechamiento de la válvula que sale de la cámara izquierda del corazón, que es la parte de bombeo principal, obliga al corazón a trabajar con más fuerza para bombear suficiente sangre a través de la apertura más pequeña, lo que provoca que el corazón se debilite y puede causar probelmas cardiacos.
El dispositivo Sapien THV está hecho de poliéster y tejido de vaca, apoyado con una malla metálica de acero inoxidable. La aprobación por la FDA de este sistema se basa en un estudio en 365 pacientes que no se podían someter a cirugía a corazón abierto.
EFE