Como es costumbre, cada 24 de diciembre, las familias se reúnen para
esperar el nacimiento del niño Dios. La Nochebuena es sinónimo de
reencuentro y unión, y este sábado, el gobernador Henrique Capriles
Radonski, aprovechó la tradicional fecha para compartir la cena de Navidad con
los funcionarios bomberiles de la estación de Cúa, municipio Urdaneta.
Cerca de las 9:00 de la noche, el mandatario regional arribó a la sede de los
apagafuegos regionales para agradecer el compromiso que asumen estos hombres y
mujeres, que arriesgan su vida, día a día, para resguardar la integridad física
de todos los mirandinos . “Hoy estamos compartiendo una cena navideña, como
todos los años con nuestros bomberos, quienes se dedican a servir a nuestro
pueblo, aún en estas fechas tan importantes en las que la unión de la
familia es fundamental, ellos trabajan para resguardarnos. Nosotros nos
caracterizamos por ser más que un gobierno, somos un gran equipo, una gran
familia que pone su mayor esfuerzo en el bien de todos los mirandinos”.
Capriles Radonski recordó la importancia de ser un gobierno cercano con su
pueblo y con los trabajadores, al tiempo que recalcó el compromiso que tiene el
cuerpo bomberil con todos los habitantes de la entidad.
“Nosotros sabemos
lo difícil que es pasar estas fechas decembrinas sin su
familia, y es por eso que año tras año, compartimos en cada estación de
bomberos como una gran familia. Estar aquí hoy, demuestra lo comprometidos que
estamos con nuestra labor y con todas las personas que cuentan con nuestro
servicio. Ser funcionario es un privilegio, porque nos permite servirle a
nuestro pueblo y seguir construyendo un estado de progreso”.
El Gobernador de Miranda compartió el plato navideño con los funcionarios y
durante la velada hablaron del sueño de transformar el país: “Quiero extender
mis más sinceros deseos de paz, prosperidad y felicidad para todos ustedes y los
invito a que sigamos trabajando para construir entre todos, el camino de
oportunidades que deseamos todos los venezolanos”.