El ingeniero Ramón Cornieles, quien trabajó en la industria petrolera por más de 40 años, brindó sus impresiones sobre la tragedia de Amuay al diario El Nacional. Afirmó que el accidente “no fue súbito” y traerá pérdidas económicas.
“En nuestra apreciación, hubo una salida de gas que no se sabe si fue por una tubería rota o se originó de los tanques mismos y eso coincide con una época del año en Paraguaná cuando el viento se paraliza, y quizás si no se hubiera dado esa circunstancia el accidente no habría ocurrido porque el gas hubiese escapado”, apuntó Cornieles.
A continuación la entrevista completa publicada en El Nacional
–¿Es posible que ese accidente ocurra súbitamente?–No fue súbito. Hay testimonios de que desde el viernes notaron el gas y el estallido ocurrió el sábado en la madrugada. Un accidente súbito habría sido que se hubiera dado una explosión de la esfera o una rotura mayor, pero en este caso estamos en presencia de alguna pieza que se rompió y empezó a botarse el gas.–La Memoria y Cuenta 2011 de Petróleos de Venezolana señala que hubo paradas de mantenimiento que no se hicieron, ¿ese hecho puede asumirse como causante del accidente?–Las paradas de planta se realizan cada cuatro años y lo sensato es efectuarlas en ese período, pero ha habido retrasos por falta de materiales. A eso hay que agregar que ahora en Pdvsa existe mala planificación.–¿Hubo mala planificación de las paradas?–Por supuesto. La planificación de una parada se inicia dos años antes de la ejecución y en ella participan todas las especialidades de ingeniería y un grupo muy importante es el de inspección de equipos porque se busca que entre 85% y 90% del mantenimiento que se realice sea principalmente preventivo y predictivo, mientras que el correctivo debe ser de 10%.–¿Por qué tan bajo el mantenimiento correctivo?–Porque se trata de un mantenimiento más costoso y se hace sólo cuando se daña algún equipo o instalación que debe reemplazarse. Una parada se realiza en un momento dado porque si se pospone hay el riesgo de que termine siendo más correctivo que preventivo y en ese caso el mantenimiento podría resultar más oneroso.–¿Qué puede ocasionar el hecho de que una parada de mantenimiento se posponga por varios meses o un año?–Riesgos de inseguridad y mayores costos.–Cuando en la Memoria y Cuenta se dice que hubo un desfase en el mantenimiento, ¿debe asumirse que Pdvsa pagará más dinero?–Totalmente. Una planta tiene una pérdida enorme cuando se paraliza y por eso una parada casi se ha convertido en todo un arte para realizarla en el menor tiempo posible.Un día fuera de producción en Amuay cuesta 2 millones de dólares en números gruesos, asumiendo que está completamente paralizada; y por otro lado hay otra prueba de la falta de mantenimiento, como es la importación de gasolina que Venezuela viene realizando desde hace 4 años a un costo de entre 10 millones y 12 millones de dólares diarios.–Se habla de insuficiencia de materiales como una de las razones de los retrasos de mantenimiento, ¿debió comprarlos Bariven (la filial de Pdvsa encargada de la adquisición de equipos foráneos)?–Los departamentos de materiales también hacen compras en el país y por eso no necesitan ir a Bariven. En promedio se puede tardar 18 meses desde el momento en que se coloca la orden de compra hasta el momento en que se recibe una pieza. Habría que investigar si ese retraso fue porque la orden de compra no se hizo a tiempo o es atribuible a Bariven.–Pareciera que en otras refinerías sí hubo mantenimiento.–En el caso de El Palito aparece que se realizaron, pero debe observarse que una parada que estuvo programada para realizarse en 80 días se terminó haciendo en 8 meses y eso es tremendamente costoso. Además, en esa instalación hay una situación peligrosa porque casi a su orilla pasa una de las autopistas más importantes del país; y eso debe revisarse, toman-do en cuenta lo ocurrido en Amuay.–Para usted, que trabajó en Cardón, ¿cuál es la situación de esa planta?–Si tomamos en consideración lo que dice la Memoria y Cuenta de Pdvsa del año pasado vemos que también muestra retrasos en sus paradas de planta.–¿Y la refinería de Puerto La Cruz?–Por lo que sabemos es la única en la que se han hecho inversiones, pero aún no han culminado. También allí, como en Cardón, hay que revisar la franja de seguridad que debe existir entre las plantas y la ciudad, porque están pegadas. Ahora también debe tomarse en cuenta que resulta trágico observar cómo el Gobierno se compromete en participar, hacer o comprar refinerías fuera de Venezuela mientras vemos el descuido que tienen las instalaciones que están en el país.–¿Tiene sentido la participación de Pdvsa en las refinerías de Cuba, Jamaica o República Dominicana?
–Yo no se lo veo. Las compras que se hicieron anteriormente tuvieron claro cuál era el mercado y el consumo que se iba a atender.–El gerente de refinación de Paraguaná, Jesús Luongo, dijo que ahora en Pdvsa hay más accidentes porque sí se informa; y que eso no ocurría antes con las antiguas filiales, que ocultaban esos hechos porque competían para ganarse el premio llamado Casco de Oro.–Jamás. Eso va contra la ética de cualquier persona que le dedique su vida a la industria petrolera. Un accidente no se puede ocultar porque las compañías de seguro llevan un registro cuidadoso y anualmente realizan una evaluación para determinar el costo de aseguramiento.–¿Esas compañías son extranjeras?–Sí, y cuando vienen al país traen expertos en refinación de primer nivel. A esas compañías nunca se les puede engañar. Investigan todos los accidentes ocurridos en el año, al igual que la seguridad de las instalaciones y la cantidad de conatos de incendio.
–En el caso de Amuay, ¿la compañía de seguros podría decir que no cubre la pérdida?–No lo sé porque dependerá de cuáles fueron las instalaciones dañadas y el costo de éstas, además del monto y cobertura que tengan las pólizas.–Así como a cualquier persona una aseguradora le puede aplicar deducibles por la póliza de su vehículo, ¿a Pdvsa le podrían aplicar deducibles por las refinerías?–Totalmente. Si la situación de la planta está en el suelo una compañía puede negarse a otorgar el seguro, pero no creo que sea el caso. Más bien pienso que el costo de la póliza que está pagando Pdvsa es demasiado elevado. Al igual que a cualquier persona que choca mucho le aumenta el monto de lo que debe pagar al año, a Pdvsa le pasa lo mismo porque perdió capacidad de defensa contra los seguros por la cantidad de accidentes y seguramente le están imponiendo unos montos en las pólizas que ni siquiera le permiten chistar.–¿Cuánto puede estar pagando al año?–No lo sé. Si se ve el informe de seguros que se ha difundido, se observa que Amuay fue asegurada por 11 millardos de dólares.Ficha PersonalIngeniero. Director de Refinación de Shell en Venezuela. En Maraven fue gerente de la refinería de Cardón y director de exploración y producción. Ocupó la presidencia de Bariven.
“Un día de paralización total en Amuay cuesta 2 millones de dólares”
Por: Andrés Rojas Jiménez
El Nacional
Por: Andrés Rojas Jiménez
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