Desde los mil hasta los 10 mil soles va el tarifario de los sicarios, es decir, los asesinos a sueldo que le han puesto precio a la muerte.
Los criminales han escalonado sus honorarios dependiendo del estrato social, laboral y económico de la víctima. En Chiclayo, al norte del país, no baja de 10 mil soles el crimen de un empresario, según dijeron fuentes de la Unidad Antiextorsiones de la División de Investigación Criminal (Divincri) de dicha ciudad.
Indicaron a Perú 21 que por matar a un obrero exigen entre 5 mil y 7 mil soles.
Las fuentes refirieron que los sicarios son más buscados para saldar ajustes de cuentas, extorsiones y hasta vengan infidelidades.
La mayoría de los sicarios que operan en Lambayeque viven en barrios de Trujillo y son contactados a través de cabecillas de bandas de extorsionadores recluidos en diversos penales del norte, como El Milagro, en La Libertad, y el de Picsi, en Lambayeque.
El jefe policial de La Libertad, coronel Roger Torres, informó al diario que en dicho departamento, los sicarios cobran de mil soles a 2,500 soles y que la mayoría son adolescentes.
En Piura, en lo que va del año se han reportado 20 muertes por ajustes de cuentas perpetrados por estos homicidas. Muchos de los crímenes están relacionados con los conflictos entre mineros informales del distrito de Suyo, en la provincia de Ayabaca. Los asesinos cobran entre 5 mil y 10 mil soles por estos encargos.
RPP
