A través de un comunicado de la Cancillería, el gobierno nacional rechazó las declaraciones del Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, sobre la trifulca escenificada en la Asamblea Nacional el pasado martes.
El gobierno venezolano expresó que la postura del vocero de la OEA es injerencista y se encuentra coordinada con voceros del Departamento de Estado y la Casa Blanca.
A continuación el comunicado:
Venezuela rechaza declaraciones injerencistas del Secretario General de la OEA
El Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela rechaza contundentemente las desmesuradas e injerencistas declaraciones del Secretario General de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza, dadas en evidente y estrecha coordinación con voceros del Departamento de Estado y de la Casa Blanca; y en las que partiendo del sobredimensionamiento de la lamentable trifulca ocurrida en días pasados en el Parlamento venezolano, como consecuencia de provocaciones de la bancada opositora, se pretende generar la percepción de una crisis política en Venezuela que amerite su mediación.
El Gobierno Bolivariano considera como absolutamente cínicas e inmorales esas pretensiones, especialmente cuando provienen de quienes han minimizado e invisibilizado los graves hechos de violencia fascista, ocurridos el 15 de abril del presente año y en días subsiguientes, como consecuencia del desconocimiento de los resultados electorales por parte del candidato perdedor y de su llamado a la ira y la violencia después de las elecciones del 14 de abril.
Nada o poco han dicho estos voceros sobre los asesinatos políticos de los ciudadanos y ciudadanas venezolanos, militantes todos de la Revolución Bolivariana: José Luís Ponce, Rosiris Reyes, Hender Bastardo, Luis Eduardo García, Rey David Sánchez, Johan Antonio Hernández, Henry Rangel, Keller Guevara y Johnny Alberto Pacheco; y más de 70 heridos, hombres y mujeres del pueblo venezolano, que fueron víctimas de la intolerancia política y social de la dirigencia opositora. Cabe recordar incluso que el diputado Julio Borges, Secretario General del opositor partido Primero Justicia, el día 15 de abril, llamó a "dar muerte a la revolución", siendo la secuela de esa afirmación la quema de 7 casas del principal partido político democrático de Venezuela, como lo es el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Nada o poco han dicho estos voceros sobre la promoción por parte de líderes de la oposición venezolana, de una política xenofóbica contra los médicos y profesionales de la salud de nacionalidad cubana, los cuales prestan servicio al pueblo más humilde de Venezuela.
A pesar de este silencio cómplice e inmoral de algunos gobiernos y organizaciones internacionales, las instituciones democráticas venezolanas, junto a la conciencia y madurez política del pueblo formado por el Comandante Eterno Hugo Chávez, lograron conjurar el comportamiento antidemocrático y violento de sectores de la oposición, gozando hoy nuestro país de plena estabilidad política e institucional, con un gobierno legítimo y legal, dirigido por el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela Nicolás Maduro Moros, el cual se encuentra desplegado en la calle, atendiendo la demanda social de nuestro pueblo.
Finalmente, el Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela rechaza firmemente cualquier intento de promover mediaciones no requeridas, y se muestra dispuesto a confrontar, con toda la fuerza que le permite ser un país independiente, cualquier injerencia, de quienes no tienen moral para hablar de diálogo, democracia y paz, pues han plagado al mundo de guerra, violencia y muerte durante los siglos XX y XXI.
La inmensa mayoría democrática del pueblo de Venezuela y las instituciones del Estado tienen la fuerza legal y moral para garantizar la estabilidad política, la paz y la independencia de la Patria de Simón Bolívar.