Los colombianos se aprestan para elegir este domingo en segunda vuelta a su presidente para el periodo 2014-2018 en una jornada para la que están habilitados 32.975.158 electores y en la que puede ser determinante la abstención, que en la primera ronda fue del 59,93 %.
Los dos aspirantes, el presidente Juan Manuel Santos, que busca la reelección como candidato de la coalición Unidad Nacional, y Óscar Iván Zuluaga, del movimiento uribista Centro Democrático, manifestaron su confianza en el triunfo pese a que las últimas encuestas, de hace una semana, reparten por igual el favoritismo del electorado.
"Estamos entusiasmados y optimistas por todas estas adhesiones que hemos recibido en estos quince días, son sintomáticas, pero el verdadero resultado se verá el domingo", afirmó el mandatario en una entrevista con RCN La Radio.
Según Santos, en todo el país ha "palpado" el "entusiasmo" de la ciudadanía con su propuesta centrada en la paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), los dos grupos guerrilleros del país con los que su Gobierno dialoga para poner fin a medio siglo de conflicto armado.
Zuluaga, que fue el más votado en la primera vuelta del 25 de mayo, con el 29,25 % contra el 25,69 % de Santos, también expresó su confianza en que el resultado de las urnas le será favorable.
Zuluaga representa en estas elecciones las ideas del expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), quien fue el mentor de Santos hace cuatro años y hoy es su principal opositor con un duro discurso contra la forma como el Gobierno maneja el proceso de paz con las FARC, que ha calado en un importante sector de la población.
Tanto Santos como Zuluaga, que fueron ministros de Uribe, han forjado sus propias alianzas y sumado adhesiones de diferentes sectores en las tres últimas semanas, pero su gran desafío está en atraer el voto de los indecisos y principalmente de los desencantados con la política que no se entusiasman con ninguno de los dos.
De los casi 33 millones de ciudadanos llamados a las urnas, en la primera vuelta sólo votaron 13,2 millones, es decir el 40,07 %, lo que significa que casi 20 millones prefirieron no votar, y si una porción de ese electorado decide hacerlo este domingo será decisiva en el resultado.
La abstención en esa primera vuelta fue la más alta de los últimos veinte años en el país, donde el voto no es obligatorio.
Para estos comicios, la Registraduría instalará 89.389 mesas distribuidas en 10.642 puestos de votación en todo el país, los mismos números de la primera vuelta.
EFE