Los “líderes de por vida”, como existen en las dictaduras, no tienen cabida en la Iglesia, afirmó el papa Francisco, dirigiéndose a los responsables de movimientos católicos sin decir si estaba pensando o no en su papel de papa.
Refiriéndose a “casos tristes” de dirigentes laicos de movimientos de la Iglesia que se creen “irreemplazables” y “eternos”, el papa afirmó que “hay que prever un tiempo limitado para los cargos, que son en realidad servicios”.
El papa argentino sueño criticar la tentación del poder. “El diablo entra siempre por la cartera”, afirmó.
El papa Francisco suscitó muchas controversias al afirmar con insistencia que la dimisión de Benedicto XVI había sido un gran gesto y que había sentado un precedente legítimo. Dejo entrever que no descartaba seguir su ejemplo, a pesar de que nunca haya dicho que cuente con dimitir.
Para algunos católicos tradicionales, el papa, “vicario de Dios en la Tierra”, elegido por los cardinales bajo la inspiración del Espíritu Santo, debe seguir siendo pontífice hasta su último suspiro. Para ellos, incluso el mero hecho de pensar en dimitir es un sacrilegio.
Fuente: AFP