Petra Laszlo, la periodista húngara que pateó y puso zancadillas a refugiados sirios que llegaban al país desde Serbia, ha reconocido su acción, pero no ha querido dar explicaciones y no ha pedido perdón, informó hoy el medio para el que trabajaba.
El canal privado húngaro N1 despidió a la periodista y aseguró que ésta "reconoció su acción, aunque no pudo dar explicaciones" sobre su comportamiento.
Se le puede ver en otras imágenes pateando a varios refugiados, incluida una niña.
Algunas opiniones tachan el caso en húngaro, inglés, árabe y portugués, entre otros idiomas, como una vergüenza y afirman que la periodista representa lo peor de la humanidad.
La formación de izquierda Coalición Democrática, del ex primer ministro socialdemócrata Ferenc Gyurcsány, y el partido Együtt-PM anunciaron hoy que denunciarán a la reportera por agredir a los refugiados.
Laszlo podría enfrentarse a una pena de cárcel de entre 1 y 7 años, ya que los hechos están agravados porque la violencia está dirigida contra miembros de un colectivo, según informó el Comité Helsinki por los derechos humanos.
En el punto de reunión de Röszke, donde llegan primero los refugiados que cruzan la frontera y donde tienen que esperar, antes de ser trasladados a los centros de registro, se produjeron intentos de fuga y protestas por parte de los refugiados en días anteriores. Ellos se quejan de que deben esperar mucho tiempo allí y pasar incluso noches a la intemperie.