Según el Banco Central de Venezuela (BCV), “Venezuela acelera su crecimiento” porque el PIB registró una expansión de 5,6% en el I trimestre de 2012. Sin embargo, el vocero de la Unidad advierte que el gobierno ha empeorado nuestra dependencia del petróleo.
En el IV trimestre del año pasado, el BCV había reportado que la construcción demandada por el sector privado había disminuido en 13,5%, afectada por la menor disponibilidad de insumos básicos. La historia se repitió un trimestre después: la demanda de obras del sector público creció en 56,6%, mientras que la construcción demandada por el sector privado disminuyó en 10,6%. “Prácticamente un sólo proyecto del gobierno explica el crecimiento de los últimos trimestres, y es un proyecto que pone en evidencia la incapacidad del mismo gobierno”, apuntó Balza.
El Coordinador Económico de la MUD recordó que “Entre 2003 y 2010 PDVSA se destinó a la Misión Vivienda 4.064 millones de dólares con resultados tan mediocres que el Presidente ordenó en 2011 que PDVSA destinara 4.010 millones de dólares adicionales a una nueva “Gran Misión” Vivienda. Para hacerse una idea del monto de los recursos dirigidos a este fin, conviene compararlo con el superávit en la cuenta corriente de la balanza de pagos correspondiente al cuarto trimestre de 2011, que fue de 4.576 millones de dólares”.
Las ventas petroleras venezolanas aumentaron en 2011 por efecto del alza de 33,6% en el precio promedio de la cesta venezolana. Este incremento fue lo único que permitió un mayor gasto público en servicios prestados por el Gobierno general, y un incremento en las importaciones de bienes en 17,7% y 38,6% en los dos últimos trimestres. La disponibilidad de divisas contribuyó a la vez a desacelerar la inflación y a incrementar la producción. Sin embargo, “este resultado no es más que el reflejo en el espejo de 2009 y 2010, cuando la escasez de divisas fue uno de los factores que, junto con el racionamiento eléctrico, explicaron la caída del PIB por seis trimestres consecutivos. Al caer el precio del petróleo, la inversión en PDVSA en 2009 cayó en 12,3%, sus aportes a Misiones y Programas Sociales en 62,0% y su aporte fiscal en 41,6%. Contracción, inflación y escasez fueron las consecuencias”, agregó.
Balza recuerda que el Plan Siembra Petrolera establecía un incremento de la producción de crudo, para 2012, a 5,8 millones de barriles diarios. “Hoy la producción sigue siendo la mitad. El incumplimiento de las metas del Plan se suma a la deficiente planificación en todo lo que es responsabilidad del Estado, como la electricidad y las cárceles. Nuestra situación se agrava por el propósito del gobierno de sustituir las actividades productivas privadas, por importaciones o por producción del Estado, que descansan exclusivamente en ingresos petroleros y en decisiones arbitrarias del Poder Ejecutivo”, concluyó.
NOTA DE PRENSA
