El futbolista brasileño Ronaldinho Gaúcho se presentó conevidentes signos de ebriedad al primer entrenamiento de la temporada de su club, el Flamengo.
Tres medios de comunicación de ese país –TV Globo, Globoesporte y RedeTV– informaron que el mejor jugador del mundo 2005 llegó al estadio a las 9:30 de la mañana junto a su guardaespaldas, y que pidió no participar en el entrenamiento alegando una dolencia muscular.
El antiguo jugador del Barcelona ya fue marginado por el técnico de la selección canarinha, Mano Menezez, y ahora parece haber cansado a los dirigentes del Flamengo.
Eso sucedió el miércoles, pero el jueves, también llegó tarde. Esta vez la presidenta del club, Patricia Amorim, fue testigo del hecho. Pero el 10 de la eterna sonrisa corrió con suerte porque aún no había comenzado la práctica.
“Llevo tres meses y estoy arto de Ronaldinho. ¿Qué puedo decir de un campeón mundial, balón de horro y millonario? Él es quien debe explicar por qué hace lo que hace”, espetó su entrenador Joel Santana.
Con información del diario AS