(EFE).- El Gobierno argentino recurrirá mañana a la ONU para lograr la liberación de la fragata Libertad, retenida en Ghana desde hace tres semanas por la demanda presentada por un fondo especulativo, mientras se espera la evacuación inminente del grueso de la tripulación del buque escuela.
El canciller argentino, Héctor Timerman, lidera la delegación argentina que viaja hoy a Nueva York para explorar una nueva vía de solución al conflicto, tras el fracaso de las negociaciones que funcionarios de Defensa y Exteriores mantuvieron a principios de esta semana con las autoridades de Ghana en Accra.
Timerman se reunirá mañana con el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y con el presidente del Consejo de Seguridad, Gert Rosenthal, para denunciar la violación de los derechos humanos de los tripulantes y de varios tratados internacionales.
El Gobierno argentino sostiene que las autoridades del país africano incumplen la Convención de Viena al no garantizar la inmunidad de un buque de la Armada, como es la fragata Libertad.
La Justicia ghanesa aceptó la demanda de embargo planteada por el fondo NML, que reclama a Argentina el pago de una deuda de 284 millones de dólares más intereses por unos bonos soberanos que entraron en mora a finales de 2001, en medio de una severa crisis económica.
El juez ghanés Richard Adjei Frimpong dictaminó que Argentina renunció a la inmunidad diplomática de sus bienes al emitir sus bonos soberanos.
Timerman abordará estos aspectos legales con la consejera legal de Naciones Unidas y secretaria general asistente para Asuntos Legales, Patricia O’Brien, informó la Cancillería argentina en un comunicado.
La Fragata Libertad, el buque escuela de la Armada argentina, se encuentra retenida en el puerto de Tema desde el pasado 2 de octubre con 326 tripulantes a bordo: 289 argentinos, 23 graduados de Uruguay y de Chile y 13 invitados de Paraguay, Bolivia, Venezuela, Brasil, Perú y Sudáfrica.
La presidenta argentina, Cristina Fernández, ordenó ayer evacuarles “de forma inmediata”, a excepción del capitán y de una dotación mínima, al considerar que estaban en riesgo “por falta de garantías”.
Sin embargo, los 326 tripulantes permanecían hoy en el puerto ghanés de Tema y la Cancillería argentina no facilitaba información sobre la fecha de su repatriación.
“Sabemos de la orden de evacuación, pero no hemos recibido instrucciones a tal efecto“, dijo a Efe un oficial del puerto de Tema, que pidió permanecer en el anonimato al no estar autorizado para hablar con la prensa.
Entre la tripulación hay 289 marinos de Argentina, más 23 graduados de Uruguay y de Chile y 13 invitados de Paraguay, Bolivia, Venezuela, Brasil, Perú y Sudáfrica.
La fragata Libertad zarpó el pasado 2 de junio desde el puerto de Buenos Aires para cumplir su anual viaje de instrucción y tocó, entre otros, puertos de Brasil, Surinam, Guyana, Venezuela, Portugal, España, Marruecos y Senegal, antes de llegar a Ghana.
La detención del buque insignia provocó un duro cruce de acusaciones entre los ministerios de Defensa y de Exteriores sobre quién había decidido el itinerario de la fragata.
La crisis le ha costado el cargo, hasta el momento, a cuatro altos mandos, entre ellos el jefe de la Armada, Carlos Alberto Paz, y la jefa de la dirección de Inteligencia Estratégica de Defensa, Lourdes Puente Olivera.
Para destrabar el conflicto, Argentina ha pedido también la colaboración de los países que tienen marineros enrolados, pero el apoyo explícito de varios de ellos, como Uruguay o Brasil, ha sido por ahora insuficiente.
El canciller Timerman reiteró ayer que la única opción que no están dispuestos a contemplar es la negociación directa con el “fondo buitre”, tal y como les exige el juez.
El fondo de inversión NML, con sede en las islas Caimán, pide una fianza de 20 millones de dólares que el Gobierno argentino se niega a pagar.
