«Ha estado bien. Ha sido positivo». Éstas han sido las primeras palabras del presidente ruso, Vladimir Putin, después de su encuentro con el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, en Milán. El líder del Kremlin y el de Kiev han sido los grandes protagonistas de la segunda jornada de la cumbre ASEM, a la que asisten los líderes de Europa y Asia.
Al encuentro entre Putin y Poroshenko han asistido también el primer ministro italiano, Matteo Renzi, el presidente francés Hollande, la canciller Merkel, el premier británico Cameron y el presidente de la Comisión europea Barroso. Tras la reunión, celebrada en la delegación del gobierno en Milán, Renzi se ha mostrado optimista: «Hay diferencias, pero se ha dado un paso adelante y ha habido una conversación constructiva. Podemos ser positivos después de este encuentro», ha afirmado Renzi.
«Positivo» era la palabra que más subrayaban los asistentes a la reunión, en la que se discutió de la actuación efectiva del acuerdo de paz que ponga fin al conflicto armado y de las negociaciones para las cuestiones del gas. En la crisis entre Moscú y Kiev, la cuestión energética es sin duda el arma más potente de presión que tiene el Kremlin contra Ucrania y Europa.Control de fronteras de Ucrania
Los países europeos han mostrado su disponibilidad a colaborar en el «control de las fronteras en Ucrania, para lo que disponemos de nuevas tecnologías, incluso con drones», afirmó Matteo Renzi, quien además subrayó: «No podemos aceptar que Ucrania sea inestable, pero tenemos que involucrar a Rusia en las grandes cuestiones internacionales; su papel podría ser muy importante para el Ébola, Estado islámico, Siria, Irak, Libia y otras crisis internacionales».
El presidente de la Comisión, José Manuel Barroso, ha señalado que en el encuentro de Putin, Poroshenko y los líderes europeos se puso de relieve que «la cosa más importante es la actuación del protocolo de Minsk» (consta de 12 puntos, entre otros prevé la concesión de un«estatus especial de autogobierno» y la celebración de elecciones locales en las rebeldes regiones de Donetsk y Lugansk). «Si esto no sucederá, la Unión Europea deben mantener las sanciones y las presiones sobre Rusia», ha precisado David Cameron.
Los dos mandatarios participaran en un desayuno organizado por el primer ministro italiano, Matteo Renzi, al que han acudido también el presidente francés, François Hollande; la canciller alemana, Angela Merkel; el primer ministro británico, David Cameron, y los presidentes del Consejo y la Comisión europeos, Herman Van Rompuy y José Manuel Durao Barroso.
La cita en la Prefectura de Milán en los márgenes de la cumbre del foro Asia-Europa (ASEM) aborda el seguimiento de los acuerdos de Minsk firmados el pasado 5 de septiembre entre las fuerzas gubernamentales ucranianas y los separatistas prorrusos.ABC
