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El Consejo de Seguridad de la ONU y la comunidad internacional en su conjunto deben esforzarse más para proteger a los civiles en Siria, dijo este jueves la coordinadora de Ayuda de Emergencia de Naciones Unidas.
Durante su última participación bajo esa investidura ante el órgano de seguridad, Valerie Amos recordó que durante más de cuatro años el mundo ha visto a Siria descender a abismos de desesperación cada día más profundos sin que se perciba una salida hasta el momento.
Amos lamentó que pese a que en febrero del año pasado el Consejo adoptó una resolución que exigía a las partes en conflicto ajustarse a las leyes internacionales y permitir el acceso de la asistencia humanitaria, los implicados hayan ignorado el texto y limiten la entrada de esa ayuda, entre otras disposiciones.
Apuntó que más de 12 millones de personas precisan asistencia de emergencia y 7,6 millones han sido desplazadas y que cuatro millones más se han refugiado en países vecinos.
"El Consejo de Seguridad tiene responsabilidades y poderes considerables. Por el bien de Siria y sus generaciones futuras, este Consejo debe dejar de lado sus diferencias políticas y unirse para encontrar una solución a tan intrincados problemas", subrayó Amos.
Agregó que entre las responsabilidades que el Consejo debe cumplir destaca la de identificar a los responsables de abusos contra los derechos humanos para presentarlos ante la justicia.
